11 de Julio de 2011 - Seguridad Vial

La Rioja-Una pareja salvó su vida por un milagro tras espectacular vuelco

EN PLENA ZONA SUR. AL PARECER EL VUELCO SE HABRÍA PRODUCIDO POR LA ALTA VELOCIDAD QUE DESARROLLABA EL AUTO

Se trata de Ángel Marcos Romero (31) y Gisella Ávila (21), quien circulaba como acompañante. La joven tenía colocado el cinturón de seguridad y bajó por sus propios medios. El conductor fue despedido y cayó a varios metros del lugar.
Un joven sufrió graves heridas cuando el automóvil que conducía protagonizó un impresionante vuelco en la Avenida de Circunvalación. Por fortuna, su acompañante, una joven de 21 años resultó ilesa y salió por sus propios medios del interior del vehículo que, después de los tumbos que dio quedó convertido en una verdadera masa de hierros retorcidos. El conductor herido de gravedad y trasladado de urgencia al hospital Enrique vera Barros, es Ángel Marcos Romero (31), domiciliado en Sanagasta, en tanto que su acompañante es la joven Gisella Ávila (21), de la calle Teniente 1º Ibáñez y Pellegrini. La posición final y los daños que registró el vehículo hizo que la gente que se congregó en la madrugada de ayer, se pregunten cómo los ocupantes del automóvil resultaron prácticamente ilesos.

Impresionante vuelco
Fue en la madrugada de ayer, alrededor de las 2.10, en la Avenida de Circunvalación, casi frente a la Terminal de Ómnibus. El automóvil Chevrolet Vectra, color gris oscuro, dominio HHN-284, circulaba de Oeste a Este conducido por Ángel Marcos Romero (31), domiciliado en castro Barros, sin número, del barrio Las Flores, de Sanagasta.
Al parecer la alta velocidad con que circulaba el vehículo de última generación provocó la salida de la cinta asfáltica, cuando "mordió" la banquina. El efecto fue tan brusco que el Vectra comenzó a dar vuelcos desde la Avenida de Circunvalación en dirección a la Terminal, hasta que quedó apoyado en uno de sus costados en la colectora de la avenida que sirve de entrada a los ómnibus.
A raíz del tremendo golpe, el conductor fue despedido del vehículo y fue a caer a unos 20 metros del lugar de detención del auto, lugar donde quedaron sus zapatillas y un charco de sangre de una herida cortante que sufrió en el cuero cabelludo.
Por fortuna, la joven acompañante venía circulando con el cinturón de seguridad colocado, por lo que después de los vuelcos pudo salir por sus propios medios de entre los hierros retorcidos.
Equipos de Comisaría Séptima, Bomberos Voluntarios y de la Emergencia 107 trabajaron en el lugar, hasta que se constituyeron los efectivos de Accidentes Viales, quienes labraron las actuaciones.

Fuente: Nueva Rioja