“Un litro de leche por mes” parece el título de un pedido. En realidad, lo es. Pero también es el nombre de una movida solidaria que lleva años en tres ciudades cordobesas. Los años, y el devenir del país, fueron haciendo que la demanda creciera, en vez de reducirse.

La experiencia de juntar leche una vez al mes nació en la ciudad de Córdoba hace nueve años. En Río Tercero, tomaron el modelo hace ya ocho y en Alta Gracia acaban de cumplir cinco años.

 

En Alta Gracia

Surgió por inquietud de un grupo de jóvenes amigos que por 2013 se trazó un sueño: que a ningún niño de Alta Gracia le falte su copa de leche. Pasaron así de recolectar reducidas donaciones en la esquina de su barrio a sumar volumen de ayuda solidaria para los merenderos de la ciudad. El sábado último, mientras celebraban sus cinco años de acción, juntaron más de mil litros de leche.

“Éramos un grupo de amigos que hacía actividades solidarias cotidianas, cuando veíamos que a alguien le faltaba una frazada, o algún elemento de primera necesidad. Después, una amiga que estaba en el grupo ‘Un litro de leche por mes’ de Córdoba nos contó de esa idea. Hicimos un relevamiento de los merenderos locales y empezamos a pedir un litro de leche una vez por mes a los vecinos. Los primeros dos años pusimos un tablón en la esquina de mi casa”, cuenta Agustín Saieg (30), referente del grupo local. Un día decidieron montar esa mesa en el centro y las donaciones comenzaron a multiplicarse.

Nico, Lucas y Florencia son los otros integrantes de aquel grupo original y aún hoy siguen al frente.

“Empezamos a ver que crecía la cantidad de merenderos pero no así los litros de leche recolectados, así que decidimos mudarnos al centro. Y empezamos a pedir azúcar, cacao y otras cosas, porque les hacía falta de todo”, completaron.

Hoy colaboran con 10 merenderos, pero se estima que en Alta Gracia hay unos 20, y muchos de ellos con notorias carencias.

Más allá de la colecta mensual –los segundos sábados de cada mes– en distintas etapas del año realizan actividades especiales. Por ejemplo, en junio la colecta “Frazada+leche”; para el Día del Niño es “Juguete+leche”, y para Navidad algo afín a la fecha.

 

Todo lo que se colecta se reparte en el mismo día.

Entre los proyectos a mediano plazo que se plantea el grupo –que ya cuenta con personería jurídica propia– se destaca la idea de dar talleres de alimentación saludable. Y empiezan a soñar con un espacio para construir, algún día, su propia sede.

 

Alta Gracia. El sábado celebraron los cinco años de la experiencia, a partir de la iniciativa de un grupo de amigos. Hubo fiesta en la plaza. (La Voz)

 

En Río Tercero

Hace ocho años, un grupo de jóvenes de Río Tercero decidió hacer algo para los comedores solidarios. Vieron la mecánica que hacía ya un año funcionaba en la ciudad de Córdoba y la tomaron como propia. Valentina Oyarzábal, una de ellas, cuenta que el próximo domingo 24 festejarán su octavo aniversario con un nuevo día de recolección de leche.

Según su cálculo, en ocho años llevan unos 13 mil litros recolectados que entregaron, en forma rotativa, a 15 instituciones locales, entre comedores solidarios e instituciones de ayuda social.

Se reúnen en la céntrica plaza San Martín los primeros sábados o domingos de cada mes y avisan previamente por Facebook. Cada jornada les deja unos 100 litros.

En los últimos años, la crisis pega ahí también: hay más demanda pero menos donaciones. El grupo base son tres: a Valentina se suman Luis Lazarte y Julieta Motta.

 

Fuente: La Voz