Todavía no existe una confirmación sobre la procedencia de los fondos para la ejecución del proyecto, ni se informaron de manera oficial detalles del mismo. Esto se debe a que en febrero de este año, el vicegobernador Néstor Bosetti dijo a la prensa que ese monto provendría de una fracción del préstamo de 200 millones de dólares que la Provincia obtuvo a partir del denominado “Bono Verde”, en base a la colocación de títulos de deuda pública para el desarrollo de energías limpias.

Pero de forma casi simultánea, el ministro de Hacienda de la Provincia, Ricardo Guerra, aclaró que de los 200 millones de dólares del bono, “170 serán destinados para construir las torres, las bases y comprar equipamiento del Parque Eólico y los 30 millones de dólares restantes para la ejecución de obras complementarias, siempre vinculadas a la cuestión energética”, ya que la utilización del crédito tiene un destino específico.

En ese contexto, el titular de Hacienda confirmó que, por una vía alternativa, “se realizaron gestiones ante el Banco Mundial y el Banco Interamericano de Desarrollo para obtener financiamiento para otro tipo de inversión”.

El predio, que incluye un amplio edificio hoy derruido, está ubicado sobre avenida Ortiz de Ocampo al 1129 aproximadamente, frente al cruce con calle Pringles. Allí funcionaron sucesivamente el Hotel Sussex y el complejo Fénix. Fue adquirido por el Gobierno de la provincia en 2012 con el objetivo de instalar la nueva sede del Poder Ejecutivo riojano, bajo una modalidad parecida a la provincia de Córdoba, es decir, un Centro Cívico.

De este modo, al concretarse el proyecto los despachos y oficinas gubernamentales consolidarán su desplazamiento hacia la zona Sur de la ciudad, que es la que más se ha extendido en las últimas décadas, contribuyendo a descongestionar el microcentro. La medida empezó a impulsarse años atrás, cuando se constituyó el Centro Administrativo Provincial al trasladarse del Ex Hogar Escuela la sede la Universidad Nacional. El predio queda sólo a una cuadra de esas instalaciones.

En cuanto al futuro de la Casa de las Tejas, ícono de la ciudad Capital, inaugurada en 1937, trascendió que existiría la iniciativa de convertir sus dependencias en un monumento histórico.

 

Fuente: El Independiente