La primera medida  para normalizar la situación fue que dicho programa pase a  ser administrado por la delegación local del APVyU  y así  se coordinen los trabajos que lleven a cabo los pasos legales correspondientes para la adjudicación definitiva.

La confusa situación se genera ya que muchas de las viviendas del programa ya habían sido adjudicadas informalmente o marcadas para ciertas familias, esto hizo que las mismas tomen posición de las casas, sin ni siquiera ser terminadas. Otro tanto de familias directamente usurparon las construcciones por lo que la justicia determinó que todas las casas sean desalojadas.

 

IMPORTANTE REUNIÓN

Ayer estas familias se reunieron con la intendenta Silvia Gaitán y con el delegado del APVyU Jorge Jalil. En la misma se concluyó que las familias regresen al lugar donde vivían anteriormente a la toma ilegal y que desde el estado se le ayudará con, por ejemplo, el pago de alquileres, hasta tanto la obra sea finalizada para ser entregadas legalmente.  En tanto las familias que no fueron previamente “marcadas” como posibles adjudicatarias de las casas, también tendrán la posibilidad de ser analizados y tenidas en cuenta para que se les dé una solución definitiva a su problema habitacional.

Ante la consulta a la jefa comunal Silvia Gaitan sobre quien tenía a cargo este programa habitacional respondió que   “tengo información que fue Matías Díaz Moreno, no sé en calidad de qué, pero quiero dejar en claro que es la primera vez que interfiero en este programa de vivienda desde que se empezaron adjudicar las casas, había decidido no participar  hasta hoy, porque vamos a ver  cómo vamos adjudicar y finalizar las viviendas”.

Agregó que  “desde hoy y por una decisión firme Matías Díaz Moreno, no tiene ingerencia en  este programa, porque va a tomar intervención el Instituto de la Vivienda como corresponde  y porque así debería haber sido, porque sino se  termina en estas situaciones cuando administrativamente no se respetan los pasos  de  cómo se entrega una vivienda”.

Respecto a la gente que había sido marcada como posible adjudicataria Gaitán brindó tranquilidad y manifestó que “hay gente que hizo su inversión, que sacó préstamos y creo que hay muchas cosas que hay que respetar, vamos a saber cuántas casas no están adjudicadas para reubicar familias que lo necesiten. También la gente que quedará sin su vivienda, que no van a ser más de diez, el compromiso es empezarles a construir con mucho esfuerzo, porque no vivimos los mejores momentos para iniciar obra pública por una cuestión del Gobierno nacional no se recibe dinero para la obra”.

Por su parte el delegado de vivienda de Chilecito Jorge Jalil dijo que  “nos hacemos cargo de estas viviendas y vamos a trabajar y dotar de toda la capacidad técnica para darle solución y finalización  a las viviendas para dárselas a las familias”.

 

Fuente: El Independiente