Además, se buscará una readecuación de la planta del personal y de cooperativas y planes, a través de un plan con el que se incentivará al sector privado para que creen fuentes laborales y se logre un traspaso paulatino de personas desde el Estado hacia las empresas.

Sobre este reordenamiento Antonelli indicó que “no serán medidas drásticas, ni se va a echar gente”, sino que se implementará un “programa ordenado” de traspaso de recursos humanos “hacia el sector privado”.

Anticipó que esto podría iniciarse en febrero o marzo del 2016, y que será un sistema “de desarrollo productivo y de inversiones” en la localidad. Básicamente, se incentivará a las empresas a absorber mano de obra vinculada al municipio, con un sistema que implicará ayudas en el pago de aportes patronales por parte de la comuna a los empresarios que tomen mano de obra local. Incluso participará la Agencia de Desarrollo local para la implementación de este plan. “El objetivo es sacar presión del gasto público”, acotó el funcionario de Hacienda.

Aclaró igualmente que esto se tratará en el Concejo Deliberante, junto al proyecto que enviará el Ejecutivo del Presupuesto 2016 en febrero.

 

La situación financiera

Además el funcionario manifestó que cerrando el año contable 2015 ya se puede afirmar cuáles son los valores del pasivo del municipio, que globalmente es de 1.300 millones de pesos. “Y solamente en deuda a proveedores en este ejercicio es de más de 70 millones de pesos”, dijo.

Al respecto, anunció que en enero y febrero se iniciará una propuesta a los acreedores de un “plan de pago”, “para achicar esa brecha que tenemos”.

“El pasivo es muy grande y los recursos propios del municipio son chicos para afrontar esto”, expuso.

“Lo que permitió en los últimos años el funcionamiento comunal es la ayuda extra que proviene de Nación y Provincia. Esa ayuda con aportes extras representa el 52 por ciento con respecto a los ingresos totales”, graficó.

No obstante, Antonelli mostró la cruda realidad del año 2016, “con una Provincia que está quebrada”, y que desde Nación “no será fácil conseguir” la asistencia. “Fueron muchos años de aportes para ayuda financiera a municipios que están sobrepoblados”, añadió.

Recalcó que ahora se debe buscar “un gasto eficiente de cualquier peso que ingrese al municipio”. Y trabajar en sanear las cuentas municipales, lo que se hará “de manera progresiva. No se hará en un año o en dos. El vecino debe saber que el municipio está en rojo”.

 

Fuente: La Opinión Austral