Molina apuntó a las desproligidades de las últimas horas tales como el decreto de Cámara firmado por el vicegobernador Sergio Casas, con el que desvió los destinos de la Ley que avala el crédito de 10 millones de dólares que tomó el Estado riojano en enero, como así también a la beligerancia e ineficiencia de los funcionarios del área educativa e infraestructura, como los principales causantes de lo que consideró un “estado de fastidio”.

“La gente ya no tan solo observa, sino que rechaza comportamientos como los que tuvo el vicegobernador, que antes de viajar a Roma a sacarse una foto con el papa, no tiene reparos en actuar en forma ilegal al usar un instrumento administrativo que no corresponde, para modificar lo que la Legislatura ordenó por Ley en una sesión extraordina y que en todo caso debería modificarse por otra Ley debatida públicamente en el recinto y no un por un documento que se firma en secreto y a espaldas de los riojanos”, señaló el viceintedente Capitalino que agregó que “esto revela claramente que el gobierno oculta los verdaderos destinos que tiene esa deuda, que nosotros cuestionamos con crudeza en enero porque se asume en nombre de todos los riojanos y que ya es evidente que no va a ser para que nos beneficiemos todos con obras de infraestructura básica, como argumentó el bloque oficialista en aquella oportunidad”.

Molina se lamentó de que “los hombres de dilatada trayectoria política que hoy integran el  gabinete se encuentren ensimismados de problemas y no encuentren soluciones para reclamos puntuales y sigan sin una capacidad de crítica a una gestión que a todas luces perdió la vocación por dar respuestas a las necesidades, como debe hacerlo todo buen justicialista que trabaja por el bienestar del pueblo y no cubriéndole los puntos débiles a un gobernador”.

En este sentido agregó que “es incompresibles que los Ministerios de Educación e Infraestructura, con los fondos de los que disponen, hayan abandonado a su suerte, no tan solo a los estudiantes del Profesorado Castros Barros a los que quiere hacerles entender argumentos a los palos, sino también a los padres y alumnos de las cientos de escuelas que tiene bajo su órbita en toda la provincia a las que no les ha garantizado las condiciones mínimas de infraestructura para el normal desarrollo de las clases porque algunas tienen problemas con los tanques de agua, pizarrones, instalaciones eléctricas, paredes, filtraciones y hasta malezas y alimañas”.

Asimismo invitó al gobierno a “retomar la iniciativa y hacerse cargo de las demandas de la gente”, al mismo tiempo que insistió en “la necesidad de recrear un marco de consensos sociales para evitar que los dos últimos años de la gestión de Beder Herrera no sean un escenario de zozobra para los ciudadanos, como lo están siendo hoy Chilecito, Famatina y la Capital”.

“Como municipio lo sentimos hasta un abandono institucional de la gestión que se niega a debatir una Ley de coparticipación para los municipios, nos invade jurisdicciones, o pone a funcionarios de segunda línea a competir con los intendentes, entre otros temas que forman parte de una política que los riojanos quieren dejar a tras”, señaló Molina.

Finalmente el viceintendente expresó su solidaridad con las estudiantes del profesorado Castro Barros que sufrieron la represión el miércoles y en la tarde de hoy, a los que consideró “víctimas del engaño del gobierno provincial” y dijo que se siente cercano a la diputa Lucía Ávila por la denuncia en su contra, que involucró como parte de una campaña infame contra la legisladora del bloque “La vida no se negocia” y recomendó a los diputados del bloque bederista “ocuparse de situaciones institucionales grabes como es la ausencia de la representación del departamento Sanagasta en la Cámara o el control de la transparencia en el uso de los fondos públicos antes de ocuparse de comentarios de vecinos que no tienen ninguna trascendencia”.

 

Fuente: Radio Municipal La Rioja