Lo que prometía ser una agitada sesión, se desvaneció en un segundo este jueves a las 9 y cuarto de la mañana. En un salón del Concejo Deliberante repleto de funcionarios larrañagistas y militantes del movimiento Evita, por un lado, en apoyo de la continuidad de Baraybar en la presidencia del CD, y, por el otro, de militantes de la UOCRA que fueron a respaldar a Robledo (hija del jefe del gremio, Roberto Robledo), la sesión preparatoria se suspendió. En el aire se respiraba un clima de tensión.

El concejal del Frepam, Marcos Cuelle, fue el encargado de pedir el cuarto inermedio, que se otorgó por mayoría (las justicialistas Liliana Robledo y Mariela Cabreros adhirieron y también levantó la mano, curiosamente, la extiernista Viviana Rodríguez). El edil radical explicó luego que había "dudas" en alguno de los miembros de la bancada opositora acerca de la orientación del voto.

En esa línea, se mencionó que el concejal del bloque Radical Independiente, Mariano Salomón, no había definido su voto. “Hay dos candidatos, por lo cual desde la oposición decidimos esperar un poco más. En lo personal creo que la interna del PJ la debe elegir el PJ y no participar el resto de la oposición”, dijo Salomón a Plan B.

“Esto no es una cuestión de cargos, la institucionalidad hay que cuidarla y se mantiene desde la UCR y el FrePam. Meternos en la interna del PJ es no cuidar la institucionalidad”, dijo. “Nosotros analizaremos todo y tomaremos la mejor posición. Debemos encaminarnos en una postura en común, desde la oposición”, aclaró.

Según trascendió, los concejales del Frepam exigen mayor "institucionalidad" para prestar el apoyo a Robledo. Ese eufemismo se traduce en que el Cuerpo de Relatores vuelva a manos de la oposición (actualmente lo ocupa Rinaldo Caumo) y también que la vicepresidencia del Concejo quede para un concejal que no responda al oficialismo.

Si el Frepam no obtiene estas concesiones, inclusive surgió la posibilidad de una tercera vía. Podría proponer un nombre propio para la presidencia del Concejo, con el respaldo de cinco votos. Como la bancada del PJ está dividida, Robledo y Cabreros por un lado, y los larrañagistas Juan Meca, Elisabet Taboada, Nilda Giglione y la ex tiernista Viviana Rodriguez en otra banda, tendrían chance de prosperar.

"Nadie tiene más votos que nosotros", dijeron en el bloque del Frepam. "Hay dos aspiraciones por ahora. Pero puede haber un tercera", advirtieron. Si llevaran al extremo esta postura, dejarían a Robledo y a Cabreros en la encrucijada de tener que volver al redil y terminar votando a Baraybar, a quien cuestionan con severidad, para que el PJ no pierda del control del Concejo.

Las expectativas se trasladaron para este viernes al mediodía, cuando se reanudará la sesión preparatoria. En las horas previas habrá febriles negociaciones y celulares al rojo vivo y no cesarán las especulaciones.

 

No renuncia

Por lo pronto, al finalizar la frustrada sesión, el viceintendente Angel Baraybar le dijo a El Diario que no piensa renunciar aunque no le renueven la confianza. "No estoy atornillado ni atado a un cargo. Pero a mi el pueblo me nombró para acompañar a Luis (Larrañaga) no seis o siete concejales. No voy a renunciar, no tengo problemas", dijo.

De esta manera, salió al cruce de las versiones que indicaban que dimitiría si no le renuevan la confianza, una decisión que complicaría aún más el panorama político del intendente, ya que la concejala que debería remplazarlo es Fabiana Ballejos, una exfuncionaria que se alejó de la gestión con denuncias penales contra los funcionarios de su área, en una evidente ruptura con el jefe comunal.

"Cada cual entiende la lealtad de diferentes maneras. Yo tengo que ser leal a Luis, que no es lo mismo que ser obsecuente. La persona que se tiene que ir es la que dejó de estar de acuerdo con su proyecto, no yo", tiró, finalmente, Baraybar.

 

Fuente: El Diario de La Pampa