El director del Instituto de Seguridad y Educación Vial (Isev), Dr. Eduardo Bertotti, señaló su preocupación por la evolución de la siniestralidad vial grave en el país, lo que ya ha provocado 200 muertos en Santiago del Estero en lo que va del año. 

En diálogo, el Dr. Bertotti afirmó que “se están perdiendo los valores altamente positivos que reflejaban las estadísticas de 2010 y 2011 con disminuciones substanciales en las tasas de siniestralidad, mortalidad y morbilidad”. 

“Lo advertíamos en el último trimestre del año 2012, observando una ´ralentización´ en el proceso de mejoras y solicitábamos el establecimiento de políticas específicas activas para corregir la tendencia”. 

El profesional consideró que “lamentablemente, el cuadro evolutivo del año 2013 parcial (enero a octubre), que compara mes por mes con igual período del año 2012, refleja, salvo en el mes de mayo, aumentos porcentuales de la cantidad de siniestros viales verificados en el territorio del país”. 

“De ninguna manera pretendemos generar una crítica nociva al accionar público en la materia, que entendemos como el mayor realizado en la historia de la seguridad vial argentina”, explicó. 

No obstante, enfatizó que la Organización Mundial de la Salud (OMS) hacía público su informe sobre la situación mundial de la seguridad vial en 2009, bajo el lema “es hora de pasar a la acción”. Poco tiempo después, en respuesta a esta inquietud del organismo internacional que planteaba un amplio modelo de cómo hacerlo a través del “Plan Mundial para el Decenio de Acción para la Seguridad Vial 2011-2020”, pero “a fuerza de ser sinceros, a casi tres años de tal documento, uno tiene la inquietante percepción de que en muchas jurisdicciones, todavía se están frotando las manos para pasar a la acción”. 

“Y esto es justificable cuando observamos los resultados cualitativos y cuantitativos de la endemia de los siniestros viales. En tres años el ´amperímetro´ apenas se movió. El Isev, hace ya dos años que insiste en la necesidad de implementar políticas específicas activas en materia de seguridad vial. Para ello se requiere un trabajo serio, responsable y profesional (mensurable en su aplicación y desarrollo), liderado evidentemente por los sectores públicos de los Estados, pero con responsables ejecutores tanto en ese sector como en el privado”, añadió. 

 

Políticas específicas 

El titular del Isev consideró que cada sociedad debe estudiar profundamente su problemática -para eso se han creado innumerables observatorios- en el contexto general planteado por el documento del Plan Mundial, arribar a conclusiones, diseñar y ejecutar políticas referidas a esas realidades específicas determinadas. 

“Para dar un ejemplo, no es una política adecuada que todos, instituciones y personas con toda la buena voluntad posible, salgan desaforadamente a enseñar significados de señales y consejos de comportamiento vial sin, muchas veces, una adecuada formación y desestructurada organización funcional. Tampoco resulta una política adecuada, en este tema, el declarar la Educación Vial una materia obligatoria sin proveer a los responsables de la docencia de capacitación, materiales didácticos y pedagógicos, para bajar y desarrollar los contenidos en el ambiente áulico. 

En opinión del experto, en el sector privado, “no es una política adecuada obtener una cucarda a la seguridad vial. La Norma ISO 39.001, por caso, es el guión conceptual para la real adquisición de un sistema de gestión en seguridad vial que troque la ´cultura vial´ de la empresa. Certificar la Norma es solo una consecuencia, no su finalidad”. 

“Son sólo ejemplos, expuestos en muy breves líneas, cuya limitación hace probable que alguien se sienta ofendido. No es nuestra intención. Es hora de pasar a la acción, pero a la acción responsable y eficiente, y no a la ´reacción´ visceral o gestual de compromiso. Miles de miles de vidas así lo exigen”, concluyó.

 

Fuente: Diario Panorama