Casi 24 horas después de haber recibido las llaves de sus viviendas, los vecinos del barrio Néstor Kirchner se atrincheraron este lunes en la Municipalidad de San Luis para reclamar por la falta de luz y agua en sus nuevos hogares, un reclamo justo teniendo en cuenta que estaba previsto que las casas entregadas por la gestión de Enrique Ponce contarían con todos los servicios básicos para la habitabilidad.

Unos veinte adjudicatarios se convocaron espontáneamente después del mediodía en el edificio de las calles San Martín y Belgrano, con evidente expresión de enojo. Allí, fueron contenidos por algunos funcionarios del gabinete de Ponce, entre ellos el secretario de Vivienda y Desarrollo Público, Enrique Picco y el secretario de Gestión y Desarrollo Sustentable, Francisco Petrino, quienes recibieron a los propietarios en la Sala de Situación Municipal.

“Hay un tendido de un cable que tiene que realizar la empresa. Ahora son algo de treinta metros de cable y además Edesal por el acto del lunes, cuando vio tanta concurrencia de chicos pidió una medida de seguridad, una vara más de cable a tierra”, explicó Petrino, quien dijo que los vecinos prefirieron no abandonar las viviendas por temor a que sean usurpadas.

La tensión en el palacio municipal era evidente, sobre todo cuando llegó la prensa y, en especial, El Diario de la República, ya que, contradictoriamente, un grupo de adjudicatarios se aconsejaba entre sí no realizar demasiadas declaraciones a la prensa a pesar de haber increpado y cuestionado fuerte a un cuarteto de funcionario que los recibió en la Sala de situación y buscó darles una respuesta. 

"La Municipalidad nos da toda la habilitación del trámite de conexión de luz y en Edesal nos dijeron que la obra no está aprobada. Nos mandaron de nuevo para que hablemos con algún encargado de obra del barrio Néstor Kirchner para que nos dé una solución y acá (en la Municipalidad) nos dijeron que hacen falta treinta metros de cable y que entre hoy (por ayer) y mañana (por hoy) nos iban a hacer la tirada de cable, para que recién el viernes podamos llevar los papeles a Edesal y dentro de 48 horas harían la conexión, o sea que con suerte va a haber gente que va a tener luz el sábado o el lunes", aseguró uno de los adjudicatarios, Antonio Valenzuela, quien aseguró que en la empresa de energía eléctrica no recibieron un buen trato. 

El portavoz de los flamantes propietarios dijo después que los funcionarios municipales les habían dado una solución y que en realidad "está todo perfecto".

Además de la falta de luz, algunas de las 42 casas que fueron entregadas tuvieron también problemas con el servicio de agua, con la subida a los tanques y con el drenaje. "Levanten la mano el que tiene problemas de agua", preguntó Picco en un tramo de la reunión y al menos la mitad de los vecinos manifestó que estaba con inconvenientes. "Puede haber alguna cañería puntual que está tapada", dijo el secretario de Gestión y Desarrollo Sustentable a los vecinos que descargaron su inicial bronca ante los funcionarios de Ponce.

El nuevo barrio. La flamante barriada Néstor Kirchner estaba prevista para el 25 de agosto del pasado año. Pero se concretó el lunes. Está conformada por dos manzanas que fueron edificadas en el extremo sur de la ciudad, entre la ruta provincial Nº 3 y la Autopista de las Serranías Puntanas. Los criterios de selección de los beneficiarios fue a partir de la cantidad de integrantes de cada familia, ingresos económicos y discapacidad de algún familiar. Entre los adjudicatarios hay familias numerosas, de escasos recursos conformadas por entre ocho y diez integrantes. Treinta y dos familias se componen de 4 a 7 personas, en su mayoría mujeres solteras con tres hijos o más a cargo y que perciben el beneficio de la Asignación Universal.

 

Fuente: La Gaceta de San Luís