El Concejo aprobó temas vinculados con el transporte urbano referidos al recorrido de las líneas 10 y 1 y a la autorización para viajar con la tarjeta dañada a los menores de edad, cuando regresan de la escuela a sus hogares.

El Concejo Deliberante de Paraná aprobó un proyecto de Resolución, solicitando al Departamento Ejecutivo que exija a las líneas 1 y10 del transporte urbano de pasajeros, pertenecientes a la empresa ERSA, retrotraigan su recorrido, cambiado de forma inconsulta, hacía los barrios Los Arenales y Toma Nueva.

La medida responde a numerosos reclamos de vecinos de esas populosas barriadas, que han solicitado que los micros lleguen hasta el interior de los mismos, en calles El Surubí y Rodríguez Vagaría, ya que en la actualidad el recorrido de las aludidas líneas culmina en la intersección de calles Rondeau y Jozami.

Los autores de la iniciativa concejales Verónica Martínez, María Rosana Núñez, Orlando Pacífico (FJPV), Roxana Villagra (UCR) y María Alicia Portillo (Unidos en la Militancia), fundamentaron el reclamo en que "esos casi cuatrocientos metros que anteriormente recorrían las unidades del mencionado servicio público, obliga a que una cantidad muy importante de habitantes de esos barrios, tengan que trasladarse a pie hasta la parada de colectivos".

Asimismo consideraron que esta decisión unilateral de la prestataria, crea "un inconcebible perjuicio a los habitantes de barrios Los Arenales y Toma Nueva, muy especialmente a los ancianos, madres con hijos pequeños y personas con discapacidad, situación que se agrava frente a las inclemencias climáticas, como en el caso de lluvias y tormentas".

 

Traslado de estudiantes menores de edad

En tanto, otro proyecto de Ordenanza sancionado por el cuerpo legislativo, establece la obligatoriedad de las empresas del transporte urbano de colectivos, de trasladar a los alumnos que en oportunidad de finalizar el horario escolar, no puedan utilizar la tarjeta magnética por encontrarse dañada o fuera rechazada por la máquina tickeadora.

Las mismas deberán instruir a los choferes para que firmen la tarjeta dañada, dejando constancia de la fecha y hora en que se produjo el inconveniente, a efectos de resguardar a los estudiantes ante cualquier contingencia.

La autora de la iniciativa, la concejal Adriana Torner (UCR), sostuvo que, como consecuencia de los problemas que a diario se plantean con las tarjetas de los micros urbanos, que por diferentes razones se dañan y las máquinas tickeadoras las rechazan, complica la situación del usuario cuando es menor y en el regreso a su hogar no se les permite viajar por cuestiones de control del inspector, poniendo en situación de riesgo a los alumnos.

Otra iniciativa con carácter de Resolución, que tomó estado parlamentario y fue derivado a la Comisión de Servicios Públicos, elevada por el edil Juan Enrique Ríos (Eva Perón), solicitó al Ejecutivo realice un estudio integral de la prestación del transporte urbano de pasajeros.

En tal sentido reclamó que en la próxima reunión de la Mesa de Transporte, se incorporen en el temario para su consideración, los siguientes puntos: mejoramiento de las frecuencias y la discusión sobre la peligrosidad del viaje de pasajeros parados en los micros urbanos.

 

Fuente: Diario Uno