31 de Marzo de 2013 - Mobiliario Urbano
Entre Ríos-Mobiliario escaso y destruido
Pocos equipos resisten el paso del tiempo y el vandalismo en la zona baja del Parque Urquiza, sitio preferido por los paranaenses para trotar o caminar
Miles de personas llegan todos los días al Parque Urquiza para entrenar. Algunos caminan, otros trotan y cada vez más son los que se animan a correr a buen ritmo. Son hombres y mujeres que se entremezclan con los que andan en bicicleta o los que salen a patinar en rollers.
Más allá de la disciplina que elijan en lo que todos coinciden es en el asombro que les genera el estado del mobiliario urbano que sirve para realizar ejercicios en ese espacio público.
En algún momento, el Parque Urquiza, era uno de los ejemplos que se tomaban a nivel nacional por la cantidad de aparatos públicos que tenían al aire libre para realizar entrenamientos.
Ahora queda poco y nada de las tablas para realizar abdominales. En tanto que las barras también fueron desapareciendo de a poco y son muy pocos los elementos que resisten el paso del tiempo y el vandalismo.
En la barranca que está debajo del Patito Sirirí queda una serie de barras y aros que sirven para los que están más entrenados.
Enfrente, a cinco metros, solo queda un poste como testigo de que alguna vez algo estuvo al servicio de la gente. Siguiendo por la zona baja, en diagonal a la Escuela Integral de Aerobismo ubicada en la Costanera, quedan algunas barras, la mayoría son las más altas, lo que representa que solo gente grande y con fuerza pueda aprovecharlas.
Siguiendo el circuito, al costado de las piletas del Paraná Rowing Club, en un espacio inigualable para realizar actividades físicas en espacios reducidos al aire libre, ahora resiste una tabla para realizar algunos ejercicios y solo las bases de lo que fue otra estructura.
Por último, frente a la playa del Club Atlético Estudiantes, está el que en mejor estado se encuentra. Dos tablas para hacer abdominales y los restos de una silla que habrá tenido algún tipo de uso.
Temporada
Ahora, con la llegada de una de las semanas más fuertes para el turismo en la capital provincial, la zona baja de la costanera está en un estado, por lo menos desprolijo.
Es que a la falta de equipamiento para realizar actividades al aire libre se le suma que la bicisenda ya quedó obsoleta e intransitable por el movimiento de la barranca.
A lo que hay que sumarle que, en la zona del balneario Municipal están trabajando en dos frentes de obra. Por un lado están construyendo los dos baños que están lindando con la sede de Rowing y por el otro, siguen realizando movimientos de tierra en la zona de parrillas. Si a esto se le suma la estabilización de la barranca del Patito Sirirí, los turistas, se encontrarán con un Parque Urquiza “en plena remodelación”.
Abandono
- El hierro, testigo de que alguna vez existió un equipamiento público.
- Lindero al Rowing, un espacio único, que se puede aprovechar pero a medias.
- Joven se cuelga de una de las pocas barras que se conservan en la zona baja.
Fuente: Diario Uno