Ingresó al Concejo deliberante un proyecto del gobierno municipal que busca volver a poner en funcionamiento el polémico Rango 2, la "vía rápida" para aprobar proyectos inmobiliarios que no respetan a las restricciones del Código Urbano de la ciudad.
Un proyecto de ordenanza que lleva la firma del intendente Omar Goye, y de todos los funcionarios del área de Desarrollo Estratégico, busca volver a poner en vigencia el Rango Temático 2 del Código Urbano, derogado en 2007 en medio de fuertes cuestionamientos por su uso como vía para “excepciones” y polémicas aprobaciones de proyectos inmobiliarios.
La aprobación de un estacionamiento privado usando espacio público en la playa Bahía Serena fue uno de los disparadores para que a partir de 2004, el Concejo Municipal de la época discutiera la existencia de ese rango utilizado para que numerosos proyectos privados avanzaran saltando las restricciones planteadas por el código aprobado en 1995.
B2000 reflejó en numerosas oportunidades el debate que se dio en la sociedad y que cuestionó la “discrecionalidad” de los funcionarios del entonces intendente Alberto Icare que no pusieron en marcha los mecanismos de participación de la sociedad a través del Consejo de Planeamiento y la audiencia pública, pero dieron “la rápida respuesta que las inversiones demandaban”.
De hecho, hasta que en 2008 asumió la arquitecta Fabiela Orlandi al frente de la Secretaría de Planeamiento -durante el gobierno de Marcelo Cascón- no se habían puesto en funcionamiento los resortes del Rango 3 (ni del Rango 1) que implica un proceso de análisis que permite conocer en profundidad el proyecto presentado y realizarle modificaciones.
“La normativa que no se usa se oxida”, graficó Orlandi oportunamente sobre el procedimiento al que calificó como una “deuda pendiente” de los sucesivos gobiernos con la planificación de la ciudad (Ver nota). Por su parte, a 11 meses del actual gobierno, hasta el momento no hubo ningún anuncio de realización de Rango 3 para analizar los proyectos que requieren de algún tipo de autorización y excepción.
La utilización del Rango 2 despertó fuertes sospechas sobre los funcionarios políticos y de planta, y provocó el cambio de los arquitectos Eduardo Reddy en 2004 y Raúl Ferrari después, por impulsar proyectos como el Club de Campo El Redil -que llegó a la Justicia ordinaria- y el edificio Andorra, en el kilómetro 1 de Bustillo, entre otros. La “vía rápida” vuelve a escena con el gobierno de Goye y la conducción del área de Planeamiento (hoy Secretaría de Desarrollo Estratégico) a cargo de un agrimensor, Raúl Braeckman. También llega poco después de conocerse el proyecto inmobiliario Torres del Ñireco, que impulsa el propio gobierno municipal.
El proyecto de Ordenanza 239/12 propone “Abrogar Ordenanza 1741-CM-07. Derogar el Rango Temático 2 del Código Urbano Ordenanza 470-CM-95” y, además de Goye y Braeckman, lleva las firmas del subsecretario de Gestión Urbana, arquitecto Raúl Martiniau, el subsecretario de Planeamiento Territorial, arquitecto Carlos Muzio, del subsecretario de Medio Ambiente, ingeniero Jorge Cendoya, del secretario Privado, Oscar Borchichi, y del asesor Letrado -y abogado ambientalista-, Rodrigo García Spitzer. El texto ingresó a Asesoría Letrada y a comisiones de Obras y Planeamiento y de Gobierno y Legales.
Fuente: Bariloche 2000
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