Aseguró que no hay apuro para la renegociación de las áreas petroleras.Confirmó que la política salarial se debatirá desde mediados de febrero.
El gobernador Alberto Weretilneck aseguró que toda la deuda con proveedores será analizada para su pago, considerando su legalidad, precio y efectiva prestación. El monto, que aún no se ha cuantificado totalmente, ya está en 640 millones, sólo con la Tesorería, Educación y el Ipross.
Calificó de "desmadre" la situación y afirmó que "no hay apuro" para los contratos petroleros. Priorizó disponer de información y de un equipo. "Hay que hacer cumplir los contratos y eso alcanzará para darles trabajo a los desocupados", adelantó.
El viernes "Río Negro" dialogó con Weretilneck, con cinco días en la conducción de Río Negro. El despacho evidencia su reciente arribo, también movimiento, y nada parece mostrar que lo suyo fue abrupto. "Me sorprendió, me impacta, pero no me asusta ser gobernador, estoy preparado", dice. Admite el peso de la responsabilidad. "Fue muy fuerte tener un rol y pasar a ser el responsable del armado del Frente y de los rionegrinos".
"Yo no soy Carlos Soria. Él construyó este proyecto, pero no está más y cambia el equilibrio. El peronismo necesita un ordenamiento y el conductor es Miguel Pichetto", evalúa.
–¿Cuál es el número final de la deuda flotante? ¿Unos 400 millones?
–Sólo 400 millones en la Tesorería, pero Educación está en 120 millones y el Ipross con otros 120 millones. Estamos preparando un informe.
–¿Se pagará en bonos?
–Primero, la comisión analizará la legitimidad de la contratación, el precio y si se cumplió con la entrega acordada. Si todo está bien se discutirán las condiciones de pago. El instrumento se verá si es un bono o, en algunos casos, por los servicios, se negociará.
–¿Cómo resolverá la situación de los contratados?
–Son 4.269 contratados sin becas. La decisión es que todos cesaron al 31 de diciembre. Si fuera un ajuste masivo hubiera sido que no vuelven más al Estado. Se trata de su racionalización y su eficientización. Cada ministerio evaluará cuáles son necesarios. Recién veíamos la situación de los Caina y los centros de abuelos. Así se seguirá. No hay política contra los contratos.
–¿Y la revisión de la planta?
–En 20 días se tendrá la reglamentación de la ley (disponibilidad). La comisión trabajará con responsabilidad, seriedad y sin preconceptos. Hay un tema. La última ley de pase prevé que el Estado tiene seis meses para revisar si el incorporado se necesita. Lo otro es la reorganización en sí a partir de que cada ministerio resuelva su estructura, con cuántos agentes funciona.
–¿Cuándo se abrirá el debate salarial?
–La política salarial debe ser una sola para la administración pública. Se discutirá desde febrero para ver si se puede aplicar desde marzo. La discusión será con todos los gremios. Siempre dije que no teníamos animosidad ni con los trabajadores ni con los gremios.
–Igual tuvo un fuerte cruce con un sector de la Unter...
–Sí, pero ya está, ya pasó. Era una posición interna y un planteo político contra el ministerio, pero ya está.
–Como vicegobernador, desactivó las comisiones ya que no debía meterse en funciones del Ejecutivo. ¿Será igual ahora?
–Sí. Peralta (el vicegobernador) estaba de acuerdo entonces y así se va a seguir.
–En política económica hay urgencias; por caso, la renegociación petrolera...
–En las áreas petroleras y mineras no se había avanzado en las designaciones. Se unificará en una Secretaría de Producción. Ya lo hablamos con Juan Manuel Pichetto y estamos en la búsqueda de quién la conducirá. Pero no hay apuro en la renegociación petrolera. No voy a caer en el facilismo de malvender recursos porque se necesita plata.
–¿Las petroleras apuran?
–El apuro no es el problema del gobierno. Para poder negociar la provincia tiene que saber. Para eso hay que tener un equipo técnico, y no es sencillo. Tenemos que tener un equipo con capacidad y rigor técnico, es decir, similar a cualquier multinacional. Si no es así, no sirve.
–¿Está la presión de los municipios?
–Sólo con hacer cumplir los contratos y los trabajos pendientes hay empleos para todos los desocupados, como la reparación de los suelos, cañerías, tanques... que dejen los yacimientos en condiciones. El recurso es de la provincia pero sólo se queda con 150 millones anuales por declaraciones juradas. Por eso, Río Negro creará una empresa petrolera provincial y otra minera para ser socia en la conducción y la explotación. Tanto es así que algún yacimiento puede quedar en manos del Estado. No hay apuro. El llamado se piensa para el segundo semestre.
–¿Y la fruticultura?
–La semana próxima será importante porque estará el ministro de Agricultura en la asunción de Juan Manuel Pichetto. Hay que trabajar con todo el complejo frutícola, los productores, el gremio y la CAFI. Hay que plantearse un acuerdo para levantar la cosecha y pasar esta temporada.
–¿Un acuerdo significa aportes de la Nación?
–Sí, hay 30 millones para la Federación, que ayudarán para la cosecha, y habrá otras medidas. Hay un avance –que estoy monitoreando– entre la CAFI y el gremio y seguramente habrá un acuerdo salarial. Todos están poniendo para acordar y levantar la cosecha. Luego, en abril, en el invierno, nos sentaremos para consensuar y definir un modelo frutícola provincial.
Fuente: Diario Río Negro
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