28 de Agosto de 2014 - Julian Dominguez
JDP-CFK apoyó el trasladol y a Julián Domínguez se le infló el pecho
¿Quién conoce a Julián Domínguez? En el mundo político, todos. A pocos metros de ahí, nadie. Su sueño de llegar a la Casa Rosada es público pero, a pesar de ser el presidente de la Cámara de Diputados de la Nación, no aparece en los primeros cinco puestos de las encuestas. Sin embargo, su equipo de prensa cree en los milagros y confían en un triunfo o, por lo menos, en una pelea digna
En Santiago del Estero, Cristina Kirchner habló de comenzar a debatir un eventual traslado de la Capital Federal a otra parte del país y a Domínguez se le infló el pecho. Es que fue él quien sugirió, meses atrás, exactamente lo mismo. ¿Fue un guiño?
Como sea, el presidente de la Cámara Baja tiene pocas chances de pelear una candidatura presidencial. Algunos sugieren que “no gana ni a intendente de Chacabuco”. Este sábado apostó a lo seguro pero le salió mal. Confiado con su hombre en Chaco, Carlos “Quelo” Palacios, intendente de Tres Isletas, participó de un acto donde la militancia pegó el faltazo.
El ex ministro de Agricultura buscaba que el acto fuera una plataforma para reafirmar sus aspiraciones presidenciales como candidato del “interior profundo”, pero Palacios ni siquiera pudo llevarle un funcionario provincial. “Se quedaron solos”, observaron algunos sectores del peronismo chaqueño.
En Chaco muchos atribuyen el aislamiento del acto del sábado a la pertenencia de “Quelo” al Grupo San Martín, el nucleamiento que Domínguez armó para plantar su bandera como candidato a suceder a CFK. “No huno nadie, solamente Julián”, confirmaron a NOVA fuentes que participaron del evento. Pero él no se queda quieto.
En un intento más de figurar en la pelea por la sucesión de Cristina, criticó a los líderes de la oposición que no apoyan el proyecto del Gobierno para cambiar el lugar de pago de la deuda, y los tildó de ser “presidenciables de Griesa”. Ahora que su slogan sobre el traslado de la Capital tuvo el visto bueno del Ejecutivo, parece que sus consignas llegaron para quedarse.
“Lo de la Presidenta fue un llamado a la reflexión. Nosotros creemos que hay una super concentración de población”, reflexionó Domínguez, haciéndose el distraído. La ilusión está, pero no sea cosa que el 2015 llegue como un balde de agua fría para los ingenuos que viven en el microclima político.
Fuente: Nova Argentina (Caba)