En la localidad fronteriza aseguran que el escándalo que protagonizó en ese momento es nada comparado con lo que le hizo a las arcas de su municipio.Una deuda millonaria, cientos de obreros instalados con una olla popular en reclamo de sueldos atrasados y obras inconclusas que se pagaron como finalizadas con fondos de la Provincia, son solo algunas de las muestras del desastre financiero que dejó su gestión.

 

La intervención

Villalba, que no dejó irregularidad por cometer y se declaró siempre ultraoficialista del Gobierno provincial, fue reemplazado por Mercedes Junco. La interventora que designó Juan Manuel Urtubey, lejos de ordenar las cuentas municipales, engrosó la millonaria deuda de Salvador Mazza. Entre tanto, el pelilargo exjefe comunal, acompañado por Junco, siguió haciendo campaña para recuperar la intendencia, porque nunca fue inhabilitado para ocupar cargos públicos. Pese al fuerte apoyo de Urtubey, Villalba perdió en las urnas y hoy, lejos de responder por descalabros que el municipio norteño difícilmente podrá sanear en lo que resta de la década, se acomodó como empresario de la construcción de obras públicas.

 

Subcontratista

Por estos días, Villalba actúa como subcontratista en la pavimentación de la ruta provincial 54, proyecto que la Provincia ejecuta con recursos del Fondo de Reparación Histórica y que en su momento generó denuncias en la Legislatura, por supuesto direccionamiento de la licitación y un presunto sobreprecio del 90% en las obras, que fueron contratadas por casi $525 millones con una UTE conformada por las empresas Noroeste Construcciones, Ingeniero Medina y Vicente Moncho.Sin que el Ministerio Público ni la Justicia investigaran sus irregulares manejos, Villalba alterna sus nuevos negocios con salidas en las radios de Salvador Mazza, donde atribuye todas las denuncias en su contra a "maniobras políticas" de sus adversarios.

 

La coparticipación afectada

El actual intendente de Salvador Maza, Rubén Méndez, quien asumió en diciembre del año pasado, expuso los motivos por los que su gestión pudo hacer frente a demandas y reclamos perentorios."Este municipio recauda sumas importantes en forma genuina del comercio de frontera y del transporte pesado que cruza desde y hacia Bolivia y estamos administrando los recursos de manera responsable. Afortunadamente, se terminaron las ollas populares y los cortes de ruta, porque el personal municipal cobra en tiempo y forma", puntualizó. Méndez hizo notar que los fondos de coparticipación están comprometidos hasta 2015 por los anticipos que el Gobierno provincial le otorgó al anterior intendente.

"Tuve que hacer una negociación con la Provincia para que no nos descuente toda la coparticipación, sino un porcentaje. Ahora tenemos que volver a negociar porque si bien seguimos sustentando esta administración en la recaudación genuina del Municipio, no podemos darnos el lujo de prescindir de la coparticipación. Los vecinos quieren obras, mejoras, servicios y todo se puede brindar en la medida en que contemos con recursos", aclaró el jefe comunal.

 

No había documentación

Méndez recordó que al ingresar al Municipio "no teníamos documentación para saber dónde estábamos parados, por lo que tuvimos que recurrir a la Provincia para armar el rompecabezas. Hablé personalmente con cada uno de los proveedores que reclamaban por cheques devueltos e incumplimientos de pago y a todos les pedí paciencia y comprensión. De esa manera pudimos ir respondiendo a los reclamos, pero hay cosas que se nos pasan y la semana anterior nos cayó un embargo por $100.000. Pudimos acordar una forma de pago y superamos el problema, pero sabemos que se presentarán muchos otros", recalco el intendente.

 

La deuda

Hasta el día de hoy el monto y la responsabilidad por la pesada deuda de Salvador Mazza generan dudas y controversias. Aunque parte sustancial de ese rojo cercano a 20 millones de pesos se atribuye a desmanejos del destituido intendente, en más de una declaración periodística Villalba aseguró que Mercedes Junco recibió un importante saldo a favor en los inicios de su también cuestionada intervención.

 

Los gastos en la plaza

Salvador Mazza inaugurará el viernes la plaza 9 de Julio.“En la obra tenemos ocupados a 150 trabajadores”, detalló Méndez.El proyecto fue iniciado por Villalba quien invirtió en esa plaza $7 millones.

“Era un lugar abandonado y tuvimos que iniciar la obra casi desde cero”, manifestó Méndez. Vamos a invertir $5 millones, una suma inferior a los $7 millones que supuestamente gastó la anterior gestión cuando la bolsa de cemento y otros materiales costaban la mitad ”, subrayó el intendente actual.

La plaza terminará costando $12 millones a esa comunidad del norte provincial.

 

Las claves de un millonario endeudamiento

Salvador Maza tiene comprometida su coparticipación hasta 2015, por anticipos que la Provincia le otorgó al destituido intendente Villalba.

Solo en la plaza 9 de Julio la gestión de Villalba registró gastos por $7 millones, cuando el terreno del predio ni siquiera había sido nivelado.

La interventora Mercedes Junco, designada por el gobernador Urtubey luego de la destitución de Villalba, dejó otra deuda millonaria.

Entre Villalba y Junco, quien estuvo tres meses al frente del Municipio de Salvador Mazza, dejaron una deuda de 20 millones de pesos.

Una parte sustancial de los ingresos de Salvador Mazza se apoya en el cuestiona peaje exigido por el ingreso de vehículos y cargas.

 

Fuente: El Tribuno