Alejandro construyó un liderazgo que nos motiva a ponernos la celeste y blanca no sólo durante el mes que dura el Mundial, sino durante los 365 días del año. Nos demuestra también a quienes tenemos la obligación de gobernar el país que lo más importante no es una individualidad o una candidatura sino el proyecto colectivo que nos lleve hacia el objetivo futuro

Los jugadores dentro de la cancha, y Alejandro desde afuera conduciendo, nos dieron un mensaje a todos los argentinos, expresaron valores que cada uno desde su propia actividad sería bueno que incorpore.

Ojalá que Alejandro siga al frente de la Selección es lo que deseamos la gran mayoría de los argentinos. Pero más allá de la decisión que tomes, quiero resaltar que con tu trabajo y dedicación nos dejó una buena herencia, un modelo a replicar y continuar en el futuro. 

 

Fuente: www.juliandominguez.com.ar (Caba)