26 de Agosto de 2013 - Comercio
La Rioja-Argentina ilegal: se detectaron 484 saladitas en 111 ciudades del país
Habiendo relevado 357 ciudades de la Argentina, se detectaron 111 con Saladitas. Allí, se encontraron 43.132 vendedores ilegales con ventas por $1.277 millones en julio.
La venta ilegal se reacomoda en diferentes formatos o se traslada de región en región, pero no baja. Se detectaron 484 Saladitas en el país, 14 más que en marzo pasado, con 31.378 puestos instalados. Así surge del relevamiento realizado por CAME entre el 15 de julio y el 20 de agosto en 357 ciudades de las 24 jurisdicciones del país, para analizar la evolución de la venta ilegal.
En las ciudades donde se detectaron Saladitas se encontraron además 11.754 manteros en la vía pública. Dos fenómenos que se observaron en los últimos 4 meses, son, por un lado, que continúa el desplazamiento de los manteros hacia las Saladitas empujados por cierto incremento en los controles en la vía pública que no ocurre en igual medida con la venta dentro de esos predios. Por otro, como algunas ciudades vienen implementando controles más estrictos a la venta ilegal, los vendedores se van trasladando y aglutinando en las ciudades que controlan menos.
Del mapa de la ilegalidad elaborado por CAME surge que:
•En las ciudades con Saladitas se detectaron 43.132 puestos ilegales operando, tanto en esos predios, como en la modalidad “manteros” en la vía pública. De ellos, 31.378 fueron puestos en Saladitas y 11.754 manteros en la calle.
•Los puesteros ilegales vendieron mercadería por $1.277 millones en julio, de los cuales $1.002 millones fueron ventas en Saladitas y $275 millones de manteros.
•Frente a julio se observó que: bajó 9,1% la cantidad de puestos ilegales, aunque eso se explica fundamentalmente porque en la mayor feria del país, La Salada de Lomas de Zamora, se redujo en un tercio la cantidad de puestos básicamente porque las ventas están dirigidas al público mayorista que llega de todo el país.
Ciudades con más Vendedores Ilegales
En una u otra modalidad, la venta ilegal está instalada en la mayor parte de las ciudades del país. Desde vendedores ambulantes, manteros, vendedores particulares a domicilio, oficina o por internet, hasta el incremento de locales que aparentan comercios pero que no tienen habilitación y compiten deslealmente con el negocio en regla, todas son variantes de un fenómeno que sigue en expansión. Una expansión que deteriora el mercado de trabajo, precariza el consumo, afecta la recaudación de los municipios, y reduce la competitividad del empresario que opera en la legalidad.
Lo llamativo de las ciudades con Saladitas y Manteros en la vía pública, es que la ilegalidad se vuelve visible, fácil de detectar y por lo tanto, de erradicar o trabajar en su formalización, si hay voluntad y decisión de hacerlo. Pero aun así, no se hace nada.
De la información relevada se desprende que las 10 ciudades más comprometidas con la venta ilegal visible son:
•La Ciudad Autónoma de Buenos Aires: es el distrito más golpeado del país por la informalidad, desplazando por primera vez a Lomas de Zamora. En julio se detectaron 111 Saladitas con 5.491 puestos de ventas y otros 2.685 manteros en la capital del país. En total, 8.176 puestos de ventas ilegales en la ciudad compiten con el comercio institucionalizado, que paga sus impuestos, es controlado con frecuencia, y cumple con las normativas legales.
•Lomas de Zamora pasó a ser el segundo distrito más golpeado por la ilegalidad del país, con 4 grandes “Saladas” que estarían albergando 6.000 puestos ilegales. En los últimos meses se notó una reducción importante en la cantidad de puestos y ventas. Es que ese lugar se convirtió en un gran centro de abastecimiento de la mayoría de las Saladitas, vendedores ambulantes y vendedores particulares del país. Incluso muchos negocios informales que abundan sobre todo en el interior de la Argentina se abastecen de ese mercado, donde la venta minorista bajó y la mayorista se multiplicó. Pero a pesar de ser la cuna de la ilegalidad, Lomas de Zamora viene mejorando sus controles, erradicando a los manteros de las calles y logrando de a poco que algunos vendedores se formalicen.
•La tercera ciudad más golpeada por la presencia de vendedores ilegales es San Salvador de Jujuy: en julio se detectaron 12 Saladitas en esa ciudad con 2.150 puestos y otros 350 manteros aproximadamente en las calles.
•Las 10 ciudades con mayor cantidad de vendedores ilegales (entre manteros y Saladitas), se completan con: Mar del Plata con 1.700, San Miguel de Tucumán con 1.238, Comodoro Rivadavia en Chubut con 1.080, La Matanza, 1.000, Almirante Brown en el GBA, 1000 (localizados en el municipio de Francisco Solano), Trelew en Chubut, con 860, y Concordia en Entre Ríos, con 850.
Un dato que surge entre relevamiento y relevamiento, es que los puestos de ventas ilegales, al ser instalaciones muy precarias, muestran niveles de rotación muy altos, que están ligados a los controles que se aplican en los municipios.
Así, cuando los organismos de control salen a fiscalizar, hay reducciones importantes en su presencia: los manteros se cambian de zona o ciudad y las Saladitas se vacían de puestos o cierran. Pasado el control, en general vuelven a su normalidad.
Ciudades con más Saladitas
Las ciudades con mayor cantidad de Saladitas detectadas en julio fueron: Ciudad de Buenos Aires con 111 predios, Mar del Plata con 35, Córdoba capital con 30, el partido de La Matanza con 16, el partido de Moreno con 27, San Salvador de Jujuy con 12 y San Pedro de Jujuy con 10.
De todos modos, muchas de las ciudades relevadas si bien no informan la presencia de Saladitas con las características que habitualmente las identifican, sí señalan:
a) Presencia de mega locales multi-rubros con venta de mercadería de marcas falsificadas, que compran mayormente en La Salada, o de dudosa procedencia.
b) Presencia de ferias municipales, artesanales, americanas, de pulgas, u otros formatos, invadidas por vendedores ilegales oportunistas.
En total se detectaron en julio 111 Ciudades con Saladitas en el país, aunque habiendo relevado solo 357. Es decir, en casi 1 de cada 3 ciudades relevadas se encontraron ese tipo de instalaciones de ventas.
Penetración de la ilegalidad
Un indicador de la penetración del comercio ilegal, es la cantidad de habitantes por puesto de venta ilegal en cada ciudad. En julio ese ranking fue liderado por Río Hondo, en Santiago del Estero, con 1 puesto de venta ilegal cada 61 habitantes. El segundo lugar fue para Cerrillos, en Salta, con un puesto ilegal cada 69 habitantes.
En tercer lugar se ubicó para Capilla del Monte en Córdoba, con 1 puesto de venta ilegal cada 70 habitantes, y un aumento visible en la ilegalidad. En cuarto puesto se ubicó Ingeniero Juárez en Formosa con 1 puesto de venta cada 71 habitantes, seguida San Salvador de Jujuy con 1 puesto cada 94 habitantes y en sexto lugar, el municipio de Lomas de Zamora, que frente a la reducción de centenares de puestos de venta minorista en los últimos meses, tiene uno cada 103 habitantes.
Entre las restantes diez ciudades con mayor penetración de la ilegalidad se encuentran: El Dorado en Misiones (ranking 7 con 106 habitantes por puesto); Trelew en Chubut, con 120 habitantes por puesto (ranking 8), Tartagal en Salta con 121 habitantes por puesto (ubicación 9) y Santa Rosa en Salta con 134 habitantes por puesto. En el caso de Tartagal, se trata de dos manzanas casi completas donde las casas se han reconvertido completamente en puestos de ventas ilegales, armándose una especie de Complejo-Saladita muy grande. Según señalan desde el Centro de Empresarios de esa ciudad, en los últimos meses se han observado a su vez puestos de feriantes no permanentes a la entrada de Tartagal que igualmente no fueron computados en este informe. En Trelew, en tanto, se trata de una mega saladita con algo más de 800 puestos, pero que en temporada alta llega a albergar 1.200.
Al analizar las cifras, hay que evaluar que algunas ciudades, al ubicarse muy cercanas a otras, el impacto de estos predios de ventas informales se derraman hacia localidades vecinas. En el Gran Buenos Aires, por ejemplo, las Saladitas ubicadas en determinados municipios suelen tener impacto en todo el partido. Por ese motivo, en el caso que se dispuso información por partido, se la presentó en forma agregada.
Si bien en julio no se identificó un patrón regular entre las ciudades más expuestas a la ilegalidad, sí puede concluirse que:
a) Las ciudades localizadas en zonas de fronteras, cercanas a Bolivia y Paraguay principalmente, donde el contrabando de mercadería es intenso, se ven con alta exposición a la venta ilegal. Es el caso de ciudades de las provincias de Jujuy, Salta, Formosa, Misiones y Chaco, donde los controles se vuelven más complicados.
b) Las ciudades donde los controles son más laxos y no hay una acción conjunta entre los sectores públicos y privados para combatir la ilegalidad, están recibiendo una gran cantidad de vendedores que son corridos desde ciudades vecinas, donde se están aplicando medidas sobre todo para combatir a los manteros.
c) En los grandes aglomerados urbanos, donde el consumo es mayor y escapar a los controles resulta más fácil, se ven ciudades desbordadas por la venta ilegal, como:
Capital Federal, con casi 3 millones de habitantes y 353 habitantes por puesto ilegal, se ubica como la ciudad de más puestos ilegales del país, y en el puesto 35 del ranking de “Penetración de la Ilegalidad”;
Lomas de Zamora, con 616 mil habitantes y 103 habitantes por puesto ilegal, es la segunda ciudad de más ilegalidad del país, y ubicada en el puesto 6 en el ranking de “Penetración de la Ilegalidad”.
Mar del Plata, con 614 mil habitantes y 361 habitantes por puesto (quinta ciudad de mayor ilegalidad del país y 36 en el ranking de penetración)
San Miguel de Tucumán, con casi 600 mil habitantes y 443 por puesto (es la sexta ciudad con más puestos y en el puesto 43 del ranking de penetración).
Otras son: La Plata con 650 mil habitantes y 955 por puesto; Córdoba con 1,3 millones y 1.874 habitantes por puesto; o el partido de La Matanza, con casi 1,3 millones de habitantes y 1.255 por puesto.
Progresos detectados en los últimos 4 meses
No todas las ciudades de la Argentina se mantienen indiferentes al avance de la venta ilegal. Con el trabajo conjunto de las cámaras empresarias locales y la toma de consciencia de las autoridades municipales sobre el impacto negativo que esta modalidad de venta genera, cada vez más municipios muestran avances en el tema.
Algunos de los casos para destacar del último relevamiento fueron:
•En Gualeguaychú, provincia de Entre Ríos, se sancionó recientemente una ordenanza que regula el funcionamiento de los complejos comerciales no convencionales. Se hizo luego del anuncio de una posible instalación de una “saladita” en Pueblo Belgrano el año pasado, que generó temor en el municipio. La medida busca proteger la actividad del comercio minorista local y hacia adelante, el objetivo es lograr que los municipios del interior del departamento adhieran a la reglamentación.
•En la ciudad de Santa Fe, si bien tienen 3 saladitas con 130 puestos aproximadamente y unos 190 manteros promedian las calles, el gobierno local implementó un plan denominado "Comercio Seguro" que cuenta con la participación institucional de las cámaras de comercio de la ciudad y que, entre otras cosas, propone la progresiva eliminación del comercio informal e ilegal. El programa prevé la inclusión a la formalidad para quienes lo acepten. A su vez, frente a la decisión política de no autorizar las ferias internadas tipo Saladitas, se las están transformando en galerías comerciales con las habilitaciones correspondientes de cada local.
•En la ciudad de Neuquén, donde llegaron a haber hasta 6 saladitas, se está en proceso de regulación de la actividad ilegal, llevándola a cumplir con requisitos de inscripciones similares a los formales, pero atendiendo a la vez las situaciones más necesitadas de quienes venden en la calle. No se permiten manteros, solo con excepciones de casos que lo ameriten. Así, entre las acciones recientes: se han autorizado 40 puestos de venta móvil con parada en un determinado sector de la Ciudad, a razón de 1 por cuadra, en tanto las ferias fueron trasladas a lugares armados con la mayoría de los feriantes inscriptos en el Monotributo Social.
•En la ciudad de Mendoza, si bien persisten algunas Saladitas con puestos ilegales, hubo grandes avances en la lucha contra la ilegalidad. Por ejemplo, se redujo la venta ambulante donde solo quedan algunos autorizados, en tanto de las Saladitas, hay 3 que son del Municipio, totalmente reguladas, y 4 que son privadas pero que de apoco van regularizándose y cumpliendo con todas las normas legales.
•En la ciudad de San Juan, finalmente se logró erradicar tanto a los manteros y se está formalizando a los puesteros de las Saladitas, que por lo pronto, tienen un lugar específico de la ciudad. Lo que sigue preocupando en esta ciudad, es la compra de mercadería en frontera con Chile, que ingresa ilegalmente a la provincia.
•En Morón (Gran Buenos Aires) si bien la invasión de Saladitas y manteros es muy alta, se llevaron adelante intensos operativos en las últimas semanas en el centro de la ciudad para correr la venta ilegal en la vía pública. Aun así, esas acciones son insuficientes frente a la dimensión de la ilegalidad en esa zona, pero se espera que si el municipio les da continuidad, puedan comenzar a lograr efectos positivos.
Ciudades en Riesgo
En la medida que algunas ciudades controlan y otras no, se va observando un desplazamiento de ventas ilegales hacia aquellas donde la indiferencia de las autoridades sobre el tema es mayor. Así, en el recorrido de provincias realizado en julio, se observan numerosas ciudades en situaciones de emergencia frente al avance de la informalidad. Las más graves, por el incremento observado, fueron:
Bariloche (Río Negro): hubo un notable aumento de la venta en la vía pública. Solo en el microcentro de la ciudad se detectaron en julio 50 más vendedores que meses atrás, que en su gran mayoría provienen de otras localidades. Si bien existe una ordenanza vigente que prohíbe esa actividad, los empresarios observan que no hay voluntad política para hacerla cumplir y temen porque sigan creciendo.
Ciudad de Buenos Aires: la cantidad de Saladitas continúa en aumento. Desde la medición anterior (julio) se sumaron dos predios más, y unos 957 nuevos puestos de venta. Existe así la inédita y grave cifra de 111 Saladitas en la Ciudad con 5.491 puestos instalados. A ellos se suman 2.685 manteros que coparon las calles.
Trelew (Chubut): hay una saladita muy grande instalada, con centenares de puestos, y si algo destaca a esa ciudad es la falta completa de controles. El reclamo de los comercios pasa desapercibido en las autoridades de la ciudad.
Río Colorado (Río Negro): durante el último trimestre se autorizó a una feria con venta de productos con mínimas condiciones de salubridad, al aire libre y casi sin requisitos impositivos. Según los empresarios de las cámaras locales consultados, se vende cualquier tipo de productos, ya que por ejemplo, siquiera existen controles en un rubro tan sensible como es el alimenticio. Otros dos problemas que vienen creciendo en esa ciudad, es la apertura constante de comercios sin ninguna habilitación y la venta ambulante sin control.
Pirané (Formosa): la ilegalidad va en aumento con el agravante que es considerada como algo normal. La mercadería viene de La Salada y Paraguay, y la venden en todos lados.
San Salvador de Jujuy: las ferias están teniendo menos controles que los comercios establecidos, lo que genera un aumento constante en la ilegalidad. A eso se suman las ferias itinerantes o eventuales que aparecen en fechas especiales y encuentran en esa ciudad un sitio libre para instalarse.
Venta en redes y a domicilio: la ilegalidad en aumento
Si bien muchas ciudades del país están trabajando en políticas para reducir la venta ilegal, en el 69,7% de las 357 ciudades relevadas los centros comerciales o cámaras de comercio o industria consultados sostienen que los controles a la informalidad son insuficientes. Incluso en el 54% de las ciudades donde actualmente no hay saladitas, consideran que los controles no alcanzan ya que si bien no hay saladitas e incluso en algunas tampoco se detectan manteros, la venta ilegal se manifiesta en otro tipo de modalidades.
Desde ferias itinerantes que se instalan durante eventos o fechas especiales, casas de familias que abren sus puertas algunos días de la semana para la venta de mercadería que en su mayoría se compra en La Salada de Lomas de Zamora, hasta comercios que abren y aglutinan una cantidad de productos comprados en Saladas y Saladitas expuestos en mesas separadas que corresponden a diferentes dueños, todas son formas crecientes dentro de la venta ilegal.
Sin embargo, una modalidad que está afectando seriamente a los comercios por sus dificultades para controlar, es la que se realiza por particulares mediante redes sociales, encuentros para ese fin, o en oficinas de empresas públicas y privadas. Incluso en ciudades que hasta ahora no tenían problemas con Saladitas y manteros, se ven perjudicadas por este sistema, que con la difusión de las redes sociales, encuentra canales para crecer.
La mayoría de las ciudades manifestaron preocupación por esa modalidad de venta en el relevamiento de julio. Pero entre ellas, algunas la mencionaron como una amenaza “muy alta” para el comercio local. Algunas de las más preocupadas fueron:
Curiosidades de la venta ilegal
En parte por la falta de controles y en parte por el avance de esas fiscalizaciones, en último relevamiento surgen nuevas modalidades de venta ilegal que sorprenden. Se destacaron por ejemplo:
1. Familias que alquilan su espacio de la vereda para que se instalen manteros: se informaron casos en ciudades de las provincias de Misiones y Jujuy, como consecuencia del copamiento de esos espacios que realizan esos vendedores. De esa forma logran no ser denunciados y encuentran cierta complicidad social en su accionar.
2. Instalación de puestos de ventas ilegales en lugares impensados, como patios de escuelas o clubes de barrio: se informaron casos en ciudades de la provincia de Jujuy y demuestran la convalidación social a esta modalidad de venta.
3. Promoción de Saladitas por internet: se difunden como Paseos de Compras, e incluso se publican fotos de los productos que se venden donde claramente se puede comprobar la falsificación de marcas.
Características del Relevamiento
El relevamiento de CAME incluyó las 23 provincias con sus principales distritos comerciales y la Ciudad de Buenos Aires. En el informe realizado en Marzo 2013 se cubrieron 295 ciudades, y en el realizado en marzo 2013 se llegó a cubrir 357 ciudades. De esas localidades relevadas, se detectaron Saladitas en 111.
Los resultados cuantitativos presentados en el Mapa de la Ilegalidad se refieren sólo a las ciudades donde se detectaron Saladitas instaladas, dejando afuera aquellas localidades donde solo se registraron manteros. A su vez, tampoco se incluyeron ni se computaron aquellas ciudades que cuentan con modalidades de ventas que son variantes de Saladitas.
Esto deriva en algunas observaciones:
1) Es muy posible sean sustancialmente más las localidades afectadas por la informalidad. Desde CAME estimamos que hay al menos 500 Saladitas constituidas en todo el país y más de 65 mil puestos de ventas ilegales.
2) Hay ciudades que cuentan con ferias artesanales que combinan artesanías con reventa de productos típicos de Saladitas. En esos casos, solo se las incluyeron como Saladitas cuando más del 50% de la venta responde a ese tipo de productos.
3) Hay muchas ciudades del país donde si bien no hay Saladitas, abundan los manteros en la vía pública. Esos puestos de ventas no han sido incluidos dentro de este informe. Esa situación se observa en ciudades localizadas en provincias como Tierra del Fuego, San Luis, La Pampa, Neuquén o Catamarca que no tendrían Saladitas aunque sí una presencia fuerte de manteros.
4) En algunas ciudades no hay Saladitas tal como se las conoce, pero sí se está expandiendo un formato similar que son locales que agrupan dentro en forma disimulada, vendedores de todo tipo. Esta es una forma encontrada sobre todo en Ciudades que han impedido la instalación de esos predios de ventas. En este caso, sólo se consideraron aquellas ciudades donde esos locales tienen una dimensión grande y se pudieron identificar los vendedores dentro.
Actualmente no hay un registro de feriantes, ni vendedores ambulantes. No se sabe cuántos son, cuánto facturan ni qué venden. Sin embargo, muchas ciudades han comenzado a atender los reclamos de los comercios y vecinos, e iniciaron un proceso de reordenamiento, control, en algunos casos relocalización y blanqueo de estos predios. Se espera que con ello se pueda encarar un reordenamiento de esta modalidad de venta que en la medida que siga creciendo, no solo perjudica al comercio formal sino que debilita al sistema de producción y precariza las condiciones de empleo e ingresos de miles de hogares.
Fuente: Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME)