Justamente esta estancia por el miércoles último se encontraba sin funcionar, y el reclamo de los vecinos se dio, por la cantidad de agua estancada en el lugar, todas provenientes del sistema cloacal de los barrios de la zona sur. 

El olor se tornó inaguantable con el viento que sopló, sumándole que por momentos el agua servida cruza la ex ruta nacional 38, causando molestia en los transeúntes, motociclistas y mismos automovilistas por esta situación. 

Cabe destacar que este derrame cloacal se encuentra a 300 metros aproximadamente, del final del asfalto de la avenida Ortiz de Ocampo, ingresando por el camino de ripio, con destino al sur por la vieja ruta 38. 

Urgente solución solicitaron los vecinos que molestos argumentaron, que “por favor se presenten Aguas de La Rioja, Medio Ambiente o quienes sean los responsables a paliar esta situación, porque ya no aguantamos”. 

 

EN EL OLVIDO 

Si bien es la vieja ruta 38, varias familias están viviendo en este sector muy olvidado, debido en primer lugar lo inaccesible que se hace el camino, a medida que se alejan de la zona urbana. Además, la falta de iluminación es otro de los reclamos puntuales, donde una gran parte del barrio está sin el alumbrado público, “eso que pagamos todos los meses” argumentó uno de los vecinos denunciantes. 

Pero la basura se lleva todos los reclamos, ya que el sector se tornó un microbasural para desaprensivos, que llegan de distintos puntos de la ciudad, y sin escatimar el daño al vecindario ni medio ambiente, arrojan su basura, acumulándose gran parte en la zona donde esta el derrame cloacal, causando un foco infeccioso muy grande.  

 

Fuente: El Independiente