22 de Mayo de 2013 - Política
La Rioja-Quintela espera a junio para definir su estrategia electoral
Mientras el Intendente sigue rechazando la posibilidad de ser candidato a diputado nacional, su sector discute si compite en ese estamento y en los comicios provinciales o se automargina a modo de "protesta".
Dudas y discusiones internas. El quintelismo puro se debate por estas horas en un mar de indefinición, en gran medida como parte de una estrategia que busca posicionarse de cara al próximo período electoral esperando ofertas.
Mientras el intendente Ricardo Quintela sigue diciendo en público que está "absolutamente descartada" la posibilidad de aceptar una candidatura a diputado nacional que le ofrece el kirchnerismo nacional, deja puertas abiertas y afirma que "en política nunca está dicha la última palabra".
Por eso, aguardará unos días mas para sentar a toda su tropa, especialmente a sus caciques, para tomar una decisión. Como lo admitió a Radio Libertad el viceintendente Armando Molina, uno de los dirigentes mas fuertes del ala dura Q, hay tres opciones a debatir: arman lista para competir en diputados nacionales y Quintela la encabeza, compiten también para la renovación de las ocho bancas legislativas provinciales en Capital o dan un paso al costado y se baja todo el sector de la contienda.
En público y en privado Quintela ya marcó algunas pautas: con recursos y respaldo nacional, el quintelismo da batalla. Pero si hay que chocar contra el aparato bederista sin respaldos financiero y político se llama a silencio, a modo de "protesta".
Así, el sector que lidera el jefe comunal se hace rogar y coquetea, sobre todo, con la necesidad que tiene el kirchnerismo de sumar votos pro Cristina para ganar la mayor cantidad de bancas en el Congreso.
Es que los K saben que, sin los Q, les será muy difícil arrebatarle al radical Julio Martínez -quien conserva alta imagen e intención de voto- una de las dos bancas de diputados nacionales en disputa. Y el proyecto "Cristina eterna" necesita de una incondicional fuerza legislativa para impulsar una eventual reforma constitucional o, al menos, permitirle a la jefa de Estado llegar al fin de su segundo mandato sin sobresaltos legislativos.
Por eso junio, cuando además empiezan a vencer los plazos para presentar las candidaturas, será un mes clave, complejamente político y de arduas negociaciones. Y no solo para el quintelismo.
Fuente: F5 La Rioja