La Policía investiga la extorsión por un falso secuestro, a la que fueron sometidos el concejal Gutiérrez y su padre. Es el tercer caso similar que se registra en este departamento.
Horas de desesperación, vivieron anteayer el concejal Sebastián Gutiérrez y su padre, Carlos Gutiérrez, cuando fueron víctimas de una extorsión, basada en los falsos secuestros de ambos. Así, mientras los delincuentes extorsionaban al funcionario con la presunta captura de su padre, hacían lo mismo con el progenitor, a quien engañaban con el falso secuestro del concejal.
Según confirmó el subinspector Gabriel Páez, la Policía realizó actuaciones sumariales en averiguación del presunto delito de extorsión. Todo comenzó alrededor de las 18:00 del lunes último, cuando Carlos Gutiérrez, domiciliado en calle Leovino Martínez, recibió un llamado telefónico, a través del que le informaron que su hijo había sufrido un accidente de tránsito en la capital riojana. Allí mismo, le requirieron el número de su teléfono celular y lo hicieron salir de su casa. Además, en esa comunicación telefónica “le manifiestan que su hijo fue secuestrado”, señalaron las fuentes. Comienza así un itinerario de dos horas de angustia.
Para liberar al supuesto secuestrado, le solicitaban un depósito de 20 mil pesos, pero como no había sistema en el correo, la transacción no pudo realizarse, según relataron las fuentes. Al regresar a su domicilio, Carlos Gutiérrez se percató de que su esposa estaba hablando con el supuesto captor. Entonces, el hombre pidió ayuda en la comisaría.
Mientras esto sucedía, el concejal Sebastián Gutiérrez, nada menos que el presunto secuestrado, era víctima de la misma extorsión, pero al revés. A él, los delincuentes le dijeron que tenían secuestrado a su padre. Para liberarlo, lo hicieron dirigirse al distrito San Miguel, donde debía comprar la suma de dos mil pesos en tarjetas telefónicas. Al parecer, la idea era que el concejal debía retornar a la cabecera departamental, con cierta cantidad de tarjetas telefónicas.
Posteriormente, se logró ubicar al padre del concejal, que se dirigía también a San Miguel, ya que, según le habían dicho los delincuentes, allí su hijo sería puesto en libertad.
Tras reencontrarse, padre e hijo realizaron la denuncia en sede policial.
Casos similares
Tras estos nuevos episodios, Páez resaltó que “nos llama la atención, porque ya hubo dos casos similares a éstos”. En la misma línea, contó que, en los casos registrados en el departamento, “las personas víctimas de este delito, poseen hospedajes, cabañas y hoteles. Estas personas podrían alojarse allí, y obtienen información. Además, saben de informática y telefonía celular, pueden hackear información por distintas vías de Internet. Por eso, estamos hablando de una banda”, detalló.
En la misma línea, Páez recomendó que las personas que sean llamadas por casos similares, “recurran a una dependencia policial”. Asimismo dijo que, debido a la llegada de este delito a esta ciudad, “debemos ser reacios a brindar información”.
Del mismo modo, el funcionario policial insistió en que “seguramente es una banda”. Y contó además que “las características telefónicas, son de otras provincias, tonadas foráneas”.
Finalmente, Páez aseguró que “se está trabajando para determinar la autoría del hecho” y concluyó que “la familia sufrió un mal momento, pero ahora está bien y, si volviera a pasar por una situación así, va a saber cómo manejarse”.
Fuente: El Independiente
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