Un confuso comunicado de prensa de la Intendencia desató la polémica. El jefe de Programa Prevención y Educación Vial Martín Olivero solicitó más datos a la ciudad.
A raíz de un confuso comunicado que la Municipalidad de San Luis publicó en su página oficial y que trataba sobre la detección de "licencias de conducir falsas" durante un operativo realizado el fin de semana, el jefe de Programa Prevención y Educación Vial, Martín Olivero, envió una carta al director de Transporte capitalino, Jorge Jofré, para conocer qué tipo de licencias habían examinado y quiénes eran los titulares, entre otros datos.
El parte de prensa señalaba que "las licencias falsas poseían el formato del carnet emitido por la anterior gestión municipal", y que "algunas de las licencias adulteradas fueron visadas por la Policía provincial". Además, indicaba que "únicamente son válidas las licencias emitidas por la Municipalidad", y que los conductores que circulen con el formato antiguo y visado por la Policía "podrán ser multados", con lo que hacía pensar que la CIPE y el carnet anterior, aunque no estuvieran vencidos, ya no eran válidos.
Ante esta situación, Olivero envió a la Municipalidad una carta dirigida a Jofré, con el siguiente texto: "Por medio de la presente me dirijo a usted con motivo de los trascendidos periodísticos sobre la existencia de presuntas licencias de conducir adulteradas en la ciudad de San Luis, a los efectos que determine si estas Licencias son del formato CIPE o del anterior, quiénes son sus titulares, fecha de emisión, categoría, para corroborar con nuestra base de datos digital (en el caso de que fuera la Cédula de Identidad Provincial Electrónica) e informar al respecto".
Consultado por El Diario, Jofré indicó que las “licencias falsas” surgieron a raíz de un operativo efectuado por el área de Tránsito en vehículos semipúblicos. “Detectamos carnet profesionales falsos y cruzamos estos datos con la dirección de Tránsito”, indicó Jofré y aclaró que no eran del formato CIPE.
Hasta ayer a las 18, Olivero todavía no había recibido una respuesta del Municipio. “Si están adulteradas deberían hacer una denuncia porque se trata de la falsificación de un documento público", dijo, y aclaró que "las licencias emitidas por la Municipalidad durante la gestión anterior deberían tener plena vigencia, excepto por aquéllos que son profesionales y exigen una revisión anual".
A través de una comunicación telefónica el director de Tránsito municipal, José Bataglia aclaró que en ningún momento exigieron la renovación de licencias que aún no hayan expirado. "Sólo ofrecemos la posibilidad de que el ciudadano por propia voluntad realice un duplicado que le cuesta 72,20 pesos -no importa el tiempo que le falte hasta el vencimiento- para obtener nuestra licencia, pero igual seguiría teniendo la original, ya sea CIPE o el carnet emitido por la Policía provincial", dijo.
Un rato antes, en la Municipalidad Jofré había indicado: “Los duplicados no tienen un fin recaudatorio, esto no es una caza de brujas. Vamos a seguir con los controles y a los que están todavía con licencias viejas o con CIPE le vamos a ofrecer el duplicado. La intención es que todos tengan la licencia de la Municipalidad, no realizar multas”, concluyó.
Fuente: La República
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