21 de Mayo de 2012 - Buenos Aires

Bs. As.-Baños públicos: "salvavidas" urbanos de los que no abundan

Son un elemento clave para turistas y peatones en apuros. Ahora una iniciativa porteña vuelve a poner en foco el tema

Generalmente inadvertidos en el vértigo urbano hasta que se los necesita con urgencia, los baños públicos, pagos o gratuitos, son piezas clave para el equipamiento de los parques y paseos en numerosas metrópolis del mundo. Sin embargo, en nuestra ciudad no abundan en ninguna de sus modalidades; apenas suman un puñado los espacios verdes que cuentan con núcleos sanitarios aptos para satisfacer la demanda de turistas y transeúntes.
La reciente iniciativa de un grupo de legisladores del oficialismo porteño, que busca instalar baños con un arancel "accesible" en un centenar de plazas y parques, volvió a poner en foco el tema. Hoy por hoy, La Plata cuenta solamente con dos complejos sanitarios de este tipo: uno subterráneo, en la plaza San Martín -50 entre 6 y 7-, y otro frente a la Facultad de Medicina -avenida Iraola y 60-. Ninguno funciona las 24 horas, y ambos cierran antes del atardecer.
A los mencionados pueden agregarse los de menores dimensiones que se hallan en el sector cerrado del Parque Saavedra y el Parque Recreativo Zona Norte -camino Belgrano y 516-. El Centro Cultural Malvinas, la Terminal de Omnibus y la Estación de Trenes de 1 y 44 también tienen sanitarios públicos con diferentes formatos, generalmente habilitados en horarios diurnos o hasta las primeras horas de la noche.
En este contexto, la "renovación integral" de una treintena de puestos verdes gastronómicos, anunciada en 2009 por el municipio, comprendía la incorporación de cuatro baños de libre disponibilidad -dos para cada sexo- por cada uno de los emprendimientos ubicados en el casco urbano; sin embargo, esto no llegó aún a concretarse. La construcción y el mantenimiento de sanitarios externos también se impuso como condición a los clubes de fútbol que ocupan el Bosque, en caso de que avancen con las remodelaciones de sus estadios.
Según datos oficiales, luego de su reinauguración dos años atrás, los baños de plaza San Martín -con seis cubículos para "damas" y tres para "caballeros"- llegaron a ser utilizados diariamente, en su horario de 7 a 18, por un centenar de personas. En ese momento, la movida municipal incluyo la instalación de una docena de baños químicos en diferentes plazas.

"SOLO PARA CLIENTES"
En el cada vez más ajetreado microcentro platense, la disponibilidad de baños públicos ofrecería un alivio a los peatones necesitados que hoy no tienen más alternativa que enfrascarse en discusiones bizantinas con los encargados de bares y restaurantes que sostienen que son "sólo para los clientes". Una muletilla, advierten en la Comuna, que choca con las disposiciones que protegen a usuarios y consumidores. En capital federal, concretamente, rige desde 1994 un decreto que libera explícitamente el uso de las instalaciones sanitarias "para toda aquella persona que así lo solicite, haya o no efectuado consumición".
En las principales ciudades de Europa -París, Barcelona, Londres, Madrid- y muchas de Estados Unidos, quienes quieren usar los baños ubicados en puntos estratégicos deben abonar con una moneda, ficha o tarjeta magnética. En los EE UU, además, un fuerte porcentaje de los paseos públicos cuenta con baños gratuitos en aceptable estado de mantenimiento.

LA EPOCA DE ESPLENDOR
A inicios del siglo XX, los baños de los principales paseos platenses eran construcciones que no pasaban inadvertidas; las que quedan pueden verse actualmente como signos de una época de esplendor, con el ejemplo más notable en el Bosque, a metros del teatro Martín Fierro; allí, el antiguo sanitario de hombres es hoy una coqueta confitería. Por esos tiempos, en suelo porteño este tipo de espacios llegaba a ofrecer, gratuitamente, la chance de ducharse.
Entre las curiosidades vinculadas con el tema, se pueden mencionar las disposiciones vigentes en ciudades como Musiri -India- y Villazón-Bolivia-, donde los ayuntamientos erigieron complejos sanitarios gratuitos al tiempo que prohibieron el uso de la vía pública como retrete; en la localidad asiática, incluso, se llegó a ofrecer un incentivo económico a quienes usaran las instalaciones públicas. Cada Navidad, una firma fabricante de papel higiénico neoyorquina suele instalar en Times Square baños de lujo, con acceso libre, televisión y empleados trajeados.

Fuente: El Día