Mientras se aguarda la promulgación de la ordenanza, distintas áreas se organizan para garantizar su cumplimiento. En principio, 4 locales tendrán que cesar en sus actividades.
Funcionarios de distintas áreas municipales se preparan para dar cumplimiento a la ordenanza que prohíbe en toda la ciudad de Corrientes el funcionamiento de locales tipificados como cabarés y wiskerías. El proyecto fue tratado sobre tablas la semana pasada y tuvo acompañamiento unánime en el Concejo Deliberante. Ahora, mientras se aguarda la promulgación por parte del intendente Carlos Mauricio Camau Espínola, se estudia un plan de contención para las mujeres que se queden sin actividad, informaron a La República.
Para que la ordenanza entre en vigencia y se proceda a la clausura definitiva de los locales nocturnos, es necesario esperar a que el intendente promulgue la norma y se la publique en el Boletín Oficial de la Municipalidad.
El secretario de Salud y Medio Ambiente del Municipio, Roberto Jabornisky, indicó ayer que no se busca “perseguir a las trabajadoras sexuales” y que respetan las decisiones personales. No obstante, la Municipalidad trabaja en un plan de contención para quienes deseen dejar de ejercer la prostitución en la ciudad.
“Las ordenanzas deben pasar al Ejecutivo municipal, ser promulgadas y presentadas en el Boletín Oficial, luego veremos cómo se lleva adelante la clausura de dichos lugares”, declaró el funcionario municipal.
“No se persigue a las trabajadoras del sexo, lo hacemos por un criterio que nos fue pedido desde la Unidad Fiscal Federal para evitar un elemento que institucionalizaba la prostitución y que era manejada por un tercero”, confesó Jabornisky en radio Continental.
En este sentido, agregó que “forzar a una persona a prostituirse es una de las tareas que se realizan en las whiskerías y hay pruebas de ello en todo el país de que son la puerta de entrada a la trata de personas”.
Para Jabornisky, “las wiskerías institucionalizan la trata porque no se conoce si las mujeres están ahí por elección propia”. Sin embargo, reconoció que “hay personas que elijen realizar esa actividad, pero no sabemos si todas tuvieron esa elección o si lo hacen porque son forzadas”, tras lo cual opinó que es muy difícil distinguir quién ejerce la prostitución por elección y quién por amenaza o presión de terceros.
La ordenanza aprobada en el Concejo, deroga los incisos a), b) y d) del artículo 1° de la ordenanza N° 572/72 y los artículos 51° y 68° de la ordenanza N° 4203/05. La iniciativa fue presentada por el concejal Luis Delgado (FpV) y contó con amplio respaldo social.
Si bien el protocolo de clausura todavía no está definido, el Municipio trabaja en un programa amplio para contener a las mujeres que queden sin actividad para que tengan su sustento diario y puedan abandonar la actividad sexual, siempre y cuando cada una lo decida.
En tanto, el director general de Protección Civil y Gestión de Riesgos, Ricardo García, precisó que son 4 los locales que figuran como wiskerías en la ciudad y serán clausurados una vez que entre en vigencia la ordenanza. Están ubicados en la Ruta Nacional Nº 12 y Cazadores Correntinos, ruta provincial Nº 5, Braille al 4100 e Independencia al 3800.
“La ordenanza se cumplirá a rajatabla. Se les va a pedir el cese de actividades y el cierre definitivo del lugar. Trabajaron más de 40 años en precariedad, pedían trámite de habilitación y luego cambiaban de razón social para estirar y dilatar la situación”, explicó el funcionario.
“Desde 1972 estaban tipificadas como wiskerías, pero hecha la ley hecha la trampa”, señaló y dijo que a fin de perpetuarse, los propietarios vendían los comercios o ponían testaferros.
Fuente: La República
URL NOTA: http://www.lariojamunicipal.com.ar/index.php?modulo=notas&accion=ver&id=18907