Entre junio y agosto, 1.734 personas fueron víctimas de accidentes viales en la provincia.
La irresponsabilidad es, con frecuencia, la madre de muchas tragedias automovilísticas que podrían tal vez evitarse. Las constantes infracciones a las normas viales, la desorganización en el tránsito y el incremento de los accidentes -muchos de ellos mortales- reflejan la falta de respeto de una buena parte de los conductores catamarqueños, no solo por las leyes sino por la vida ajena y por la propia…
Según datos oficiales, los accidentes de tránsito son la causa principal de muerte y lesiones graves en jóvenes de entre 16 y 36 años de edad.
De acuerdo con una estadística del Consejo de Seguridad Vial de Catamarca, desde el 1 de junio al 31 de agosto del presente año, la transgresión más cometida por los conductores fue no respetar la prioridad de paso (artículo Nº 41 de la Ley Nacional de Tránsito 24.449).
Según el informe, en el centro más de 30 esquinas se hallan semaforizadas, pero sin embargo son el escenario donde se registra la mayor cantidad de accidentes entre vehículos. No obstante no todos son denunciados, porque solo se registran daños materiales o bien porque se trata de roces entre los rodados. Se estima que se produjeron alrededor de 15 accidentes diarios, pero según las estadísticas, se registraron cerca de ocho colisiones diarias.
En los últimos tres meses de lo que va del año se reportaron 773 accidentes, de los cuales el 70 % ocurrió en la Capital y el resto en el interior provincial.
Las cifras señalan que en los últimos años los accidentes se incrementaron en más de un 80 %.
Según indican las mismas estadísticas, hubo 246 automóviles involucrados en los accidentes, 391 motocicletas, 64 camionetas, 26 peatones, 18 camiones, 11 bicicletas, 2 ambulancias y 1 silla de ruedas. Es, por otro lado, preocupante el incremento de unidades de transporte de pasajeros que participaron en algún siniestro vial: entre junio y agosto fueron 14 los colectivos sobre un total de 773 accidentes.
En cuanto a los heridos, se detalla un total de 1.734 personas, de las cuales en más de 60 % son varones y el resto mujeres. Según un especialista consultado al respecto, esto -cantidad de varones y mujeres accidentadas- tiene que ver con que son más los hombres que conducen que las mujeres, pero también que estas últimas respetan más las normas de tránsito que los varones.
Las violaciones más comunes de los motociclistas son circular sin casco, dejar el rodado en las veredas y llevar más de dos personas a bordo. Si son automovilistas, estacionar el vehículo en zona prohibida, violar luz roja y hablar por celular. Un dato preocupante que surge del informe es que casi el 40 por ciento de las infracciones sancionadas en forma mensual, son cometidas por jóvenes.
Esto, según algunos especialistas recae sobre el grave problema de falta de educación vial y los diferentes criterios y requisitos con los cuales se manejan algunos municipios para entregar el carné de conducir.
Desde el 1 de enero al 24 de setiembre, en la provincia fallecieron 52 personas. Mientras que entre el 1 de junio y el 31 de agosto, la nefasta cifra de 14 víctimas, lo que representa un poco más del 25 % del total de los fallecidos.
7 motociclistas
3 ciclistas
2 automovilistas
1 camioneta
1 peatón
Las principales causas de los siniestros son la violación a las normas de tránsito. Hace referencia principalmente a circular a una velocidad superior a la reglamentaria, encontrarse en estado de ebriedad o bajo la influencia de otra sustancia y no respetar la prioridad de paso en las intersecciones.
No contar con los medios de seguridad activos. Se trata de los dispositivos con que cuentan los vehículos para evitar la producción del accidente. Por ejemplo, el limpia parabrisas en el caso de los automóviles y el sistema de luz en el caso de los motociclistas.
Hablar por teléfono celular. Es una mala costumbre que va cobrando más adeptos con el correr del tiempo. El conductor deja de prestar atención a la vía para responder y/o iniciar una llamada o bien, para enviar un mensaje de texto.
El 45 % de los heridos iba en moto
Por semana, en el ámbito de la Capital, se registra en promedio 60 accidentes viales con un saldo de 144 personas heridas. La mayoría de los hechos se produce durante el día y en las intersecciones. De acuerdo con las estadísticas del Consejo de Seguridad Vial de la provincia, entre el 1 de junio y el 31 de agosto del año en curso fueron reportados 773 accidentes viales, de los cuales 391 fueron protagonizados por motos o ciclomotores, dejando como saldo lesiones de diversa consideración en 782 personas, entre mayores y menores de edad. De dicho informe se desprende, además, que la mayoría de los siniestros ocurrió durante el día y son las intersecciones el escenario predominante.
En la última semana de agosto, los magistrados de la Unidad Fiscal de Delitos Correccionales fueron informados por la Policía Judicial y Policía de la provincia de aproximadamente 60 siniestros viales, de los cuales el 70 % de ellos sucedió en esquinas, lo que habla de la falta de respeto a las normas de tránsito, en este caso específico al artículo Nº 41 “Prioridad de paso” de la Ley Nacional de Tránsito Nº 24449.
Es decir que los conductores -de todo tipo de vehículo automotor- al llegar a la esquina no respetan la prioridad de paso del vehículo que circula por la derecha y atraviesan la bocacalle, desencadenando el accidente.
Para contrarrestar este flagelo que sigue en aumento, el Consejo de Seguridad Vial y la Policía de la provincia llevan a cabo operativos de control vehicular que dejan “a pie”, en muchos casos, a los conductores que sin casco o sin licencia habilitante transitan por la vía pública.
Sin embargo, y pese a la multa monetaria, las autoridades no pueden impedir que el número de víctimas -en muchos casos fatales- por este tipo de accidente siga en alza.
La problemática en porcentaje
*El 80 % de las lesiones mortales de los motociclistas es en la cabeza.
* El 42 % de los conductores de motos sale a la calle con casco, pero solo un 30 % lo usa correctamente.
* El 45 % de los heridos en accidentes son motociclistas.
* 34 días en promedio quedan internados los conductores heridos.
* El 30 % menos de probabilidad de morir tienen quienes usan el casco.
Usar el casco es como un “seguro” de vida para los motociclistas
El uso del casco en los motociclistas reduce la muerte en un tercio y evita dos de cada tres lesiones cerebrales, que en la mayoría de los casos producen el deceso de los heridos por choques. Estas lesiones son conocidas en la medicina como Traumatismo Encéfalo Craneano y lo sufre el 80 % de los motociclistas que protagonizan accidentes.
Si bien el 42 % de estos conductores sale a la calle con casco, solo un 30 % lo usa correctamente. Un profesional de la medicina del Hospital San Juan Bautista explicó los mecanismos que lesionan el cerebro en un accidente: el impacto interno por aceleración- desaceleración y el efecto directo del choque de la cabeza contra un objeto (el pavimento u otro elemento, como una columna o un vehículo etc).
“El primer impacto se conoce como latigazo por el intercambio de energía cinética. Puede causar desde lesiones leves hasta muerte cerebral”, según el entrevistado.
El movimiento que el cuerpo llevaba durante la marcha sobre la moto se detiene bruscamente en una colisión.
El cerebro choca contra la pared interna del cráneo y es impulsado en la dirección opuesta. Al caer el motociclista a la superficie lo primero que golpea es la cabeza, sufriendo lesiones tales como hundimiento y/o fractura de cráneo, hematomas, contusiones, pérdida de masa encefálica, daños intracerebrales, entre otras. Golpes que pueden causar la muerte o dejar en la víctima secuelas irreversibles. El casco es el elemento de seguridad pasivo con el que cuentan los motociclistas para reducir la gravedad de las lesiones una vez producido el siniestro vial. Por ello, al momento de adquirir uno, la persona debe tener en cuenta las siguientes características: o La cubierta exterior: es la parte más rígida. Reduce la energía del impacto y evita que penetre algún objeto punzante. Es preferible que sea de un material muy resistente.
El relleno de confort: es un acolchado que brinda comodidad y contribuye a que el casco se mantenga firme. La correa: asegura el dispositivo a la cabeza. El casco actuará solo si está sujetado y es del tamaño acorde con la cabeza.
Sosa aconseja comprar cascos que estén homologados y reemplazarlos luego de un choque o cada cinco años de uso. Advierte que los que cubren completamente la cabeza, incluyendo la quijada, son más efectivos.
Fuente: Voces Escritas
URL NOTA: http://www.lariojamunicipal.com.ar/index.php?modulo=notas&accion=ver&id=10653