Día tras día numerosas familias deben padecer los intensos olores nauseabundos que se originan debido a la acumulación de todo tipo de residuos y basuras en un predio situado entre los barrios Los Obreros II y Saúl Ubaldini, en la zona sur de la ciudad capital.
Además de ser un potencial y peligroso foco infeccioso, el baldío se encuentra cubierto por abundante maleza, donde prolifera todo tipo de insectos, motivo por el cual los vecinos reclamaron a las autoridades competentes una solución inmediata al problema.