JDP-Presidenciables K, a la espera del dedo elector de Cristina
Superado el conflicto docente, Scioli volvió a su agenda electoral. Randazzo sumó dos intendentes a su ministerio. Y Urribarri continúa de recorrida como el sucesor
Terminó marzo. Con él quedaron atrás los temores a una inesperada turbulencia por el oleaje de las paritarias. Ya de indisimulada campaña, los precandidatos del dispositivo oficial están parados en la línea de largada. Los aspirantes admitidos que aguardan el disparo son los gobernadores Daniel Scioli (Buenos Aires), Sergio Urribarri (Entre Ríos) y Juan Manuel Urtubey (Salta), junto al ministro de Interior y Transporte, Florencio Randazzo; y a los postulantes más disimulados, el titular de la Cámara de Diputados, Julián Domínguez y el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich. Todos tienen por delante la recta final de la pretemporada, que culminará cuando las miradas apunten a Brasil.
Tras la final futbolística, especulan en el batallón, llegará el dedo pre-seleccionador de Cristina Fernández de Kirchner. ?No podemos llegar 10 candidatos a las PASO?, coincidieron en una necesaria poda cerca de dos competidores, temiendo que una atomización del voto K beneficie al menos kirchnerista de todos y hoy el más mimado en las encuestas: Scioli.
?No estamos especulando. Estamos poniendo todo, aún a riesgo de que no nos vaya bien?, admitió Randazzo la semana pasada en su ciudad natal, Chivilcoy. No era metáfora lo de toda la carne al asador: a su izquierda estaba sentado el intendente local, Aníbal Pitelli, que acababa de anunciar su renuncia, dejándole el municipio a Darío Speranza, para incorporarse como jefe de Gabinete del ministerio. Jorge Rodríguez Erneta también dejó Villa Gesell para trabajar con él.
?La victoria se instala primero en el corazón, luego en los hechos. Estamos convencidos que en la Argentina va a haber un antes y un después en materia ferroviaria?, arengó Randazzo, minutos después de volver a supeditar su candidatura al balance de su gestión. ?Se siente, se siente, Florencio Presidente?, replicó su tropa la abierta bajada de línea política del ministro. Speranza asumirá el viernes. Justo cuando Randazzo esté en Nueva York para disertar en Naciones Unidas sobre Seguridad Vial. Otros ya validaron su precandidatura con una visita a la Gran Manzana: Scioli, Urtubey, el renovador Sergio Massa y Mauricio Macri. ?Vamos por algo concreto, no es humo?, se jactaban en Interior.
Con el conflicto docente, el mandatario bonaerense perdió 17 días. Su agenda electoral quedó en stand by. Apenas lo superó, mandó el primer mensaje de que había retomado la carrera: recibió en Villa La Ñata a un gobernador coreano que no dudó en calzarse una gorra naranja con ?Scioli2015?. Pero recién el viernes volverá el ajetreo de campaña, cuando visite en una sola mañana tres localidades: Moreno, General Rodríguez y Luján. El disfraz volverá a ser lo institucional: la entrega de escrituras de viviendas, 100% con fondos bonaerenses. ?De acá a fin de año vamos a mostrar nuestra propia gestión, como el tercer carril de la autopista Buenos Aires-La Plata?, prometen en la Gobernación.
También estuvo en boxes un par de semanas Urribarri, de gira asiática. Pero volvió con actividades diarias para remarcar que la suya es, a su juicio, la precandidatura más kirchnerista de todas. Como un ministro nacional más, ayer estuvo en Vaca Muerta. Mientras, prepara un segundo desembarco bonaerense. Otro que le tomó el gusto a reunirse con intendentes fue Capitanich: el viernes recibe a Los Oktubres.